Category Archives: Pediatria canina
Veterinaria: La gastritis en perros.
Las gastritis son causas importantes de vómito en el perro y el gato. Un diagnóstico de gastritis se hace sobre la base del examen histológico de biopsias gástricas. La causa de estos hallazgos histológicos rara vez se determina, y en ausencia de objetos extraños y de infección fúngica, usualmente se ha atribuido a intolerancia o alergia alimentaria, parásitos o a reacción a antígenos bacterianos. El reciente redescubrimiento de las bacterias gástricas espiraladas en perros y gatos puede ayudar a clarificar esta situación. Al momento, la relación de las especies de Helicobacter con la inflamación gástrica en perros y gatos no está resuelta.
El descubrimiento de la asociación de Helicobacter pylori con gastritis, úlceras pépticas y neoplasias gástricas ha llevado a cambios fundamentales en la comprensión de la enfermedad gástrica en humanos. Las investigaciones de las relaciones de la enfermedad gástrica con Helicobacter spp. en otros animales ha resultado en el descubrimiento de H. mustelae en hurones con gastritis y úlceras pépticas, H. acinonyx en chitas con gastritis severa y H. heilmannii en cerdos con úlcera gástrica. La presencia de organismos gástricos semejantes a Helicobacter (HLO) en el estómago de perros y gatos ha sido conocida por muchos años, pero la relación de esos organismos con las enfermedades gástricas está sin resolver, con inflamación acompañando a la infección en algunos pero no en todos los animales infectados.
Helicobacter son bacterias con forma espiral o curva, a veces cocoide, gram negativas, que ocupan las glándulas, células parietales y mucus del estómago. Los numerosos HLO gástricos en perros y gatos son morfológicamente indistinguibles al microscopio de luz, donde se ven como amplios espirales 5-12 µm de longitud, pero han sido clasificados dentro de diversas especies de Helicobacter sobre la base de secuenciación de 16s rRNA, hibridación de DNA y la apariencia en el microscopio electrónico. H. felis, H bizzozeronii, H. salomonis, H. heilmannii (también llamado Gastrospirilium hominis), H. bilis y Flexispira rappinii han sido hallados en la mucosa gástrica de los perros, y H. felis, H. heilmannii y H. pylori en el estómago de los gatos. A pesar de su importancia en las personas, hay poca información sobre la relación deHelicobacter con enfermedades gástricas en perros y gatos. Si bien está asociado generalmente con el estómago, varias especies de Helicobacter, como H. canis, H. bilis y H. hepaticus, pueden colonizar selectivamente el duodeno, el tracto gastrointestinal inferior y el hígado.
Prevalencia
Estudios recientes sugieren una alta prevalencia de infección gástrica por Helicobacter en perros y gatos. GATOS: 86% de gatos tomados al azar, 41-60% de gatos clínicamente sanos y 57-76% de gatos infectados con vómitos. PERROS: 67-86% de perros clínicamente sanos, 74-80% de perros presentados para la investigación de vómitos recurrentes y 100% de beagles clínicamente sanos infectados experimentalmente.
Patogenicidad
La gastritis aguda y crónica son consideradas causas importantes de vómito en el perro y el gato. Un diagnóstico de gastritis se hace sobre la base del examen histológico de biopsias gástricas, con varias subclasificaciones de gastritis basadas en el tipo de inflamación y la presencia de atrofia o hipertrofia de la mucosa o muscular. La causa de estos hallazgos histológicos rara vez se determina, y en ausencia de objetos extraños y de infección fúngica, usualmente se ha atribuido a intolerancia o alergia alimentaria, parásitos o a reacción a antígenos bacterianos. El reciente redescubrimiento de las bacterias gástricas espiraladas en perros y gatos puede ayudar a clarificar esta situación. Al momento, la relación de las especies de Helicobacter con la inflamación gástrica en perros y gatos no está resuelta, con inflamación acompañando a la infección en algunos pero no en todos los sujetos. Experimentos para determinar la patogenicidad deHelicobacter spp. en perros, han demostrado gastritis, proliferación de folículos linfoideos y respuesta inmune humoral después de la infección de perros gnotobióticos con H. felis y H. pylori. De todos modos, los signos clínicos de gastritis estuvieron ausentes en esos perros infectados experimentalmente. Está claro que el estado actual de conocimiento con respecto a Helicobacter asociado a gastritis en perros y gatos es pobre y se necesitan muchas más evaluaciones experimentales y clínicas para determinar su rol en la gastritis en pequeños animales.
Potencial zoonótico
La prevalencia aparentemente alta de Helicobacter spp. en perros y gatos, y particularmente el reciente aislamiento de H. pylori de un grupo de gatos de laboratorio, aumenta la posibilidad de que mascotas familiares puedan servir como reservorio para la transmisión de Helicobacter spp. a las personas. Por cierto, un caso reportado recientemente ha sugerido la transmisión de Helicobacter spp. de las mascotas al hombre. No obstante, no pueden hacerse en este momento planteos claros sobre el potencial zoonótico de perros y gatos a sus dueños, ya que la transmisión directa no ha sido demostrada y la prevalencia de la infección con Helicobacter spp. de significancia zoonótica en la población canina no es conocida.
Diagnóstico clínico
El vómito y la gastritis (la cual puede ser subclínica) son consideradas como las principales manifestaciones de infección con Helicobacter spp. gástricos en perros y gatos. Cuando el problema es el vómito, la aproximación diagnóstica se centra en descartar causas infecciosas, parasitarias, dietéticas, tóxicas, metabólicas y causas no gastrointestinales de vómito, sobre la base de la anamnesis, el examen clínico, análisis de laboratorio y radiografías o ecografías. La endoscopía se usa para investigar causas gástricas y de intestino proximal de vómitos. La apariencia endoscópica del estómago de animales con gran número de Helicobacter spp. está caracterizada en forma variable, por la presencia de grandes cantidades de mucus y erosiones en la superficie mucosa, que aparecen en relación a los folículos linfoideos. El diagnóstico de Helicobacter spp. se obtiene generalmente por su demostración en biopsias gástricas.
Evaluación de biopsias gástricas
A fin de detectar Helicobacter spp. las biopsias gástricas generalmente se someten a pruebas de ureasa, examen de improntas, cultivo microbiológico y evaluación histológica con H&E o tinción plata. En mi experiencia, la evaluación de improntas es el más sensible de estos métodos para detectar Helicobacter spp. gástricos. La evaluación de la producción de ureasa por biopsias endoscópicas es empleada comunmente como prueba tamiz rápida. Esta prueba se basa en la producción bacteriana de ureasa en biopsias gástricas ( más apta para Helicobacter spp.) por generar amonio de urea y causar un cambio de pH en una solución indicadora (rojo a rosa). El tiempo tomado para el cambio de color está relacionado con el número de bacterias presentes en la biopsia. La prueba de ureasa debe ser evaluada dentro de las tres horas, y algunos sugieren luego de 24 horas de incubación de la biopsia. La histopatología, utilizando H&E, se puede usar para demostrar organismos espiralados grandes en el mucus gástrico. Las tinciones con plata permiten la detección de menores números de bacterias que la H&E y permite distinguirlas más fácilmente de la mucosa, especialmente en las glándulas y células parietales (las bacterias aparecen como espirales negros sobre un fondo marrón claro). Para especificar el tipo de Helicobacter también pueden hacerse tinciones con plata; H. felis, H. bizzozeronii, H. salomonis y H. heilmannii son espirales gástricos grandes que van desde 5 a 10 µm mientras que H. pylori es menor (2-4 µm) y puede estar presente en formas cocoideas. El microscopio electrónico puede usarse para una especificación más definitiva de Helicobacter en biopsias de perros y gatos (basado en la presencia o ausencia de espirales o flagelos polares). La PCR y la hibridación in situ son herramientas que se descubrieron para permitir la identificación específica de los organismos en las biopsias gástricas.
Diagnóstico no invasivo
La medición de anticuerpos circulantes (IgG) contra H. pylori es un medio de diagnóstico no invasivo sensible y específico de infección con Helicobacter en humanos y ha facilitado la investigación de la prevalencia y la identificación de factores de riesgo de infección. También se ha demostrado una respuesta humoral a Helicobacter spp. gástricos en perros y gatos después de la infección natural y experimental, pero esto todavía no ha sido llevado a una aplicación clínica. La producción de ureasa por Helicobacter spp. también ha sido usada como base de una prueba instantánea con un isótopo de carbono marcado para el diagnóstico no invasivo, o para determinar los efectos del tratamiento en humanos, perros y gatos con Helicobacter. Los reportes iniciales sugieren que esta prueba permitirá la discriminación de perros y gatos infectados y no infectados.
Tratamiento
La ausencia general de conocimiento de la patogenicidad de Helicobacter spp. gástricos, ha significado que los veterinarios hagan frente al dilema de tratar o ignorar las bacterias espiraladas observadas en las biopsias de pacientes con vómito crónico y gastritis. Visto desde su patogenicidad en humanos, hurones, chitas y ratones, parecería prudente que se intente la erradicación de Helicobacter spp. gástricos previo a la iniciación del tratamiento con agentes inmunosupresores para controlar la gastritis. Los protocolos de tratamiento actuales están basados en aquellos hallados efectivos en humanos infectados con H. pylori. Un tratamiento experimental no controlado de perros y gatos con gastritis y Helicobacter mostró que los signos clínicos fueron altamente sensibles al tratamiento con una combinación de antibióticos y antagonistas H2. La amoxicilina (20 mg/kg PO, dos veces por día, 14 días), metronidazol (20 mg/kg PO, dos veces por día, 14 días) y famotidina (0,5 mg/kg PO, dos veces por día, 14 días) en perros, y claritromicina (30 mg PO, dos veces por día, 4 días), metronidazol (30 mg PO, dos veces por día, 4 días), ranitidina (20 mg PO, dos veces por día, 4 días) y bismuto (40 mg PO, dos veces por día, 4 días) en gatos, son combinaciones que han sido rigurosamente evaluadas. La evaluación de biopsias gástricas a los tres días (perros) o diez días (gatos) revelaron que 6/8 perros y 11/11 gatos estaban libres de Helicobacter, no obstante 8/8 perros y 4/11 gatos fueron hallados infectados a los 28 días (perros) o 42 días (gatos) después de terminada la terapia antimicrobiana.
Fuente de información:
http://argos.portalveterinaria.com/
Mi perro tiene cataratas. La presencia de opacidad en el cristalino es una de las causas más frecuentes de visita a la clínica de oftalmología veterinaria. Ante todo es imprescindible distinguir entre lo que se conoce por esclerosis nuclear senil y una verdadera catarata.
La esclerosis nuclear senil es un proceso muy frecuente que se produce en el cristalino de los perros de edades superiores a los siete u ocho años. Se produce un endurecimiento del núcleo del cristalino, proceso conocido por esclerosis, y se presenta esa leve opacidad. Este proceso no origina la pérdida de la visión, tal y como sí se produce en las cataratas.
Las cataratas consisten en la opacidad de la lente del ojo (cristalino) que llega a impedir la visualización del fondo ocular, o lo que es lo mismo, el paso de la luz a su través, originando pérdida progresiva de la visión del ojo afectado.
Las cataratas se pueden clasificar de diversas maneras. Así tenemos las hereditarias y las adquiridas. Las cataratas hereditarias se presentan debido a defectos genéticos y son bilaterales, esto es, afectan a los dos ojos. Suelen aparecer a tempranas edades.
Las cataratas adquiridas son aquellas cuyo origen tiene una causa nutricional, metabólica, inflamatoria, tóxica, etc. Suelen presentarse a edades comprendidas entre los uno y seis años. En relación con esto hay una pregunta que está entre las más formuladas en la visita a la clínica: ¿Se quedan los perros ciegos si toman azúcar? El motivo de esta pregunta es que uno de los síntomas más característicos de la diabetes es la aparición de cataratas, las cuales al evolucionar llevan a la ceguera del perro. Los perros, si toman azúcar, no se quedan ciegos pero, si el perro es diabético, es un riesgo que está presente.
Hay más clasificaciones de las cataratas pero, estas clasificaciones solo interesan a título clínico y no a otros niveles.
Las cataratas que se presentan en los animales viejos, cataratas seniles, suelen presentarse a partir de edades geriátricas, por encima de los ocho años y suelen presentarse tras el diagnóstico de cristalino senil.
Las cataratas tienen una evolución y así podemos hablar de cataratas incipientes, que empiezan a producirse; estas evolucionan a cataratas inmaduras, maduras e hipermaduras, aumentando paulativamente el grado de opacidad y, por tanto, imposibiltando el paso de la luz y, con ello, disminuyendo progresivamente la capacidad visual del perro hasta alcanzar la ceguera del o los ojos afectados.
¿Cómo sabemos si nuestro perro tiene cataratas? Si notamos que nuestro perro adquiere un color blanquecino, no en la capa superficial ( tal y como comentábamos en el artículo anterior) sino en su interior, podemos estar frente a un cristalino senil o frente a una catarata. Será nuestro veterinario quie, tras examinar el estado general de nuestro perro y realizando un exhaustivo examen del ojo quien llegue al diagnóstico del proceso que afecta a nuestro perro.
En esa exploración del perro se verá su estado general, se realizará un análisis sanguíneo (hay enfermedades sistémicas que tienen manifestaciones oculares, caso de la diabetes) y luego se estudian los ojos.Es muy importante no ceñirse al estudio del ojo que se encuentra afectado aparentemente pues el otro también puede estarlo aunque en menos grado ( no se aprecia a simple vista pero sí en un examen ocular).
Una vez diagnosticado el proceso causante de la catarata se procederá a instaurar el tratamiento pertinente. Normalmente el tratamiento de las cataratas es quirúrgico, extirpando el cristalino afectado e implantando una lente intraocular. Es muy importante tener controlada la causa que ha producido la catarata ( por ejemplo una diabetes) y, por supuesto, realizar un completo estudio que certifique la capacidad visual del ojo parta asegurarnos de que el perro volverá a ver una vez que se extirpa la catarata ( no hay nada más deprimente que operar a un perro de cataratas y que siga sin ver debido a que hay otras lesiones en los componentes del ojo que producen ceguera).
Hay diversas técnicas para el tratamiento quirúrgico de las cataratas pero será el cirujano oftalmólogo el que decida cual aplicar dependiendo de una serie de criterios que incluyen: posibilidad técnica, tipo de catarata, criterios económicos, etc.
Recordad que las cataratas son un proceso muy frecuente en nuestros perros, que debemos diferenciarlas del cristalino senil y que, normalmente, su tratamiento es quirúrgico.
Más información sobre las cataratas
Como siempre, recordaros que en la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) tenéis a disposición el Servicio de Urgencias 24 horas, así como el teléfono de consulta que aparece en nuestra página (www.tuveterinario.info), también operativo las 24 horas para poder solucionar todas vuestras dudas sobre este o cualquier otro tema relacionado con la salud y cuidados de vuestros animales.
Manuel Olivares Martín, veterinario de la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) y de www.tuveterinario.info
El virus causante del moquillo canino neurológico afecta a diversas especies animales y causa una importante serie de signos clínicos, cuya aparición dependerá, fundamentalmente, de la respuesta inmune del hospedador. En este artículo se realiza una exhaustiva revisión de la epidemiología, patogenia, diagnóstico, prevención y tratamiento de esta enfermedad infecciosa del sistema nervioso.
Hospital Veterinari Molins
Imágenes cedidas por los autores
El virus del moquillo canino pertenece al género Morbillivirus y familia Paramyxoviridae. Es un virus ARN capaz de codificar proteínas para su estructura, tanto de envoltorio como de núcleo. En su envoltorio tiene hemaglutininas (H), cuya función es unirse a las células huésped, proteínas de matriz (M), de fusión 1 (F1) y de fusión 2 (F2). Estas tres últimas están implicadas en la penetración en la célula huésped.
Entre las proteínas que protegen al genoma están la grande (L) y la polimerasa (P), que son funcionales y forman parte del complejo polimerasa. La proteína de la nucleocápside (N) es estructural y protege al ARN.
Otras especies susceptibles al moquillo canino son el coyote, dingo, lobo, zorro, mustélidos (hurón, marta, visón), prociónidos como el mapache, osos, herpéstidos (mangosta, suricata), y grandes felinos como el león, jaguar, ocelote y guepardo. También puede haber infecciones por morbilivirus en humanos (sarampión, rubeola), equinos, bovinos, porcinos, delfines y focas.
El virus del moquillo canino es muy lábil fuera del animal. Es susceptible a la luz ultravioleta, al calor y a la sequedad. Se elimina bien con soluciones con éter, cloroformo, fenol o amonio cuaternario. En climas fríos puede resistir semanas a temperaturas de entre 0 ºC y 4 ºC.
Epidemiología
La enfermedad se contagia a través de aerosoles; los perros afectados lo eliminan a partir de secreciones del aparato respiratorio, digestivo y también en la orina. Esto ocurre a partir de los 7 días posinfección. Entre el 25 y el 75% de los perros susceptibles presentan enfermedad subclínica, y eliminan el virus sin mostrar signos de enfermedad.
La inmunidad que desarrollan muchos perros puede prolongarse 2-3 años, pero los perros no revacunados pueden perder dicha inmunidad y ser infectados en periodos de estrés o inmunosupresión. Los cachorros de entre 3 y 6 meses de edad son los que están más predispuestos a la infección, ya que esta edad coincide con el descenso de la inmunidad maternal. Tanto a nivel sistémico como neurológico, los perros pueden ser susceptibles a cualquier edad.
Se describe menor prevalencia en perros braquicefálicos que en dolicocefálicos. La infección por el virus del moquillocanino se da con mayor facilidad en perreras y en perros que mantienen contacto con animales salvajes.
Es un virus extendido globalmente, y se producen casos en toda América, Europa, norte y sureste de Asia, África y Australia. Algunas de las cepas más neurotróficas son la Snyder Hill (polioencefalomielitis), la A75/17 y la R252 (desmielinización).
Patogénesis
El virus del moquillo canino infecta los epitelios de múltiples tejidos del organismo. Después de entrar en el huésped por vía de aerosol, se replica en los macrófagos y monocitos de las tonsilas, el epitelio del aparato respiratorio y los ganglios regionales, alcanzando el pico de replicación de partículas víricas en 2-4 días. A partir de entonces empieza la viremia, y el virus alcanza el sistema digestivo (estómago, intestino delgado), hígado, médula ósea, bazo y otros tejidos linfoides. En este momento habrá fiebre y linfopenia. Varios días después ocurrirá una segunda viremia, con la llegada de virus a las células epiteliales de los ojos, la piel y el sistema nervioso central. A partir de entonces empieza a eliminarse a través de los epitelios respiratorio, gastrointestinal y urinario.
La presentación de signos de enfermedad depende, principalmente, de la respuesta humoral del animal infectado. Si falla en su respuesta inmunitaria va a desarrollar enfermedad multisistémica con persistencia del virus en los tejidos y probable muerte del animal. Si el huésped monta una respuesta humoral inadecuada, pero al menos existente en bajos niveles, mostrará enfermedad leve o inaparente. Estos animales pueden eliminar virus hasta los 60-90 días posinfección. Si monta una respuesta de anticuerpos adecuada no manifestará signos de enfermedad.
La presencia de virus en el sistema nervioso central ocurrirá en fases tardías de la enfermedad (14-20 días posinfección) en aquellos animales sin respuesta inmunitaria o respuesta muy baja. La prevalencia del virus en el sistema nervioso de animales con buena respuesta humoral es baja.
Inmunidad del sistema nervioso y moquillo canino
El virus del moquillo canino causa inmunosupresión marcada debido a la infección en linfocitos T y B, siendo los T los más afectados. La linfopenia se debe principalmente al descenso de los linfocitos CD4+. La entrada del virus al sistema nervioso central (SNC) puede ocurrir a través de plaquetas o células mononucleares, o bien las partículas víricas pueden acceder libres a los espacios perivasculares de meninges y a los plexos coroideos del IV ventrículo y del epitelio ependimario. Hasta hace pocos años se postulaba la teoría del privilegio inmunitario cerebral, que consiste en una menor reactividad inmunitaria del cerebro que permitía evitar mayor lesión.
Ahora se sabe que el SNC tiene capacidad de activar su sistema de defensa aunque expresa menor cantidad de moléculas del CMH (complejo mayor de histocompatibilidad) de clase II. Durante la infección por moquillo la microglía activada expresa más genes del CMH, sobre todo en la forma desmielinizante. Este tipo tiene lugar de forma aguda/subaguda y ocurre durante el periodo de mayor inmunosupresión. Se ha detectado material genético vírico en los oligodendrocitos, células productoras de mielina en el SNC. El virus del moquillo provoca disfunción metabólica y morfológica en dichas células dando así lugar a una menor producción de mielina y, finalmente, desmielinización sin inflamación.
La enfermedad crónica se caracteriza por una respuesta inmunitaria celular y humoral causando manguitos perivasculares de varias capas de grosor con linfocitos, células plasmáticas y macrófagos. En esta reacción inmunomediada los oligodendrocitos sufren el daño de forma indirecta.
La persistencia de virus en el SNC puede ser debida a diversas razones. El virus se replica de forma incompleta para no ser detectado por el sistema inmunitario. Los linfocitos, responsables de la inmunovigilancia, no pasan de los espacios perivasculares.
Figura 1. Resonancia magnética. Corte transvesal ponderado en T2 en el tálamo. Se aprecia una señal hiperintensa en hemisferio cerebral izquierdo que afecta tanto a la sustancia blanca como a la gris. Si bien es una imagen compatible con encefalitis, no es específica de moquillo, ya que tiene un diagnóstico diferencial muy amplio. |
Diagnóstico del moquillo neurológico
El diagnóstico de la infección por el virus del moquillo canino neurológico puede llegar a ser complejo, como el de la mayoría de las enfermedades infecciosas del sistema nervioso. Existen, principalmente, dos inconvenientes: los signos neurológicos nunca son específicos de enfermedad sino de una localización neuroanatómica. En segundo lugar, debe demostrarse que estos signos son debidos al moquillo. Por tanto, las pruebas diagnósticas deben evidenciar la presencia del virus en el SNC.
En la hematología puede verse linfopenia durante las primeras fases de la infección (viremia) y se ha visto en el 57% de los casos descritos. También se ha descrito trombocitopenia en algunos casos. La bioquímica de los animales con moquillosuele ser normal.
La inmunofluorescencia directa para antígeno de moquillo en raspados conjuntivales es una técnica muy usada y suele ser positiva en la mayoría de casos. También se ha descrito para sedimento de orina y de lavado traqueal.
La resonancia magnética (RM) y analítica del líquido cefalorraquídeo (LCR) reflejan el estado del SNC pero dan resultados muy variables y poco específicos (figura 1). La técnica con mayor especificidad es la RT-PCR y puede aplicarse en LCR, orina, tonsilas, sangre entera o muestras conjuntivales. Actualmente existen diversas técnicas de PCR; una de ellas es la CODEHOP (consensus and degenerate hybrid oligonucleotide primer) la cual no se limita al estudio de un solo patógeno sino que lo hace de forma más genérica y detecta la presencia de bacterias o virus de forma muy sensible. Es una técnica poco específica, pero ya se ha usado para detectar paramixovirus en casos de moquillo (PCR pan-virales).
Otro método de diagnóstico para el moquillo es la inmunohistoquímica (IHQ) para detectar antígeno vírico que también tiene gran especificidad. Se ha descrito en piel, mucosa nasal y cojinetes plantares. También se puede usar con tejido nervioso en muestras de necropsia. La IHQ ha demostrado una especificidad para moquillo entre el 88 y el 96%.
Signos neurológicos en perros con moquillo
|
|
Neuropatología del moquillo canino
Pueden aparecer cambios tanto en la sustancia blanca (leucoencefalomielitis o LEM) como en la sustancia gris (polioencefalomielitis o PEM). Las dos formas de inflamación pueden verse juntas en el mismo perro pero, normalmente, tiene lugar la afectación de la sustancia gris primero, que ocurre 1 semana posinfección con inflamación no supurativa. Estos animales suelen morir en 2-3 semanas presentando síndromes convulsivos. Si el animal tiene una buena respuesta inmune o la enfermedad neurológica progresa, entonces se observa la afectación de la sustancia blanca, que ocurre aproximadamente 3 semanas posinfección. La LEM es la forma más frecuente de moquillo neurológico y es siempre posterior a la PEM subclínica. La PEM consiste en inflamación en forma de manguitos perivasculares formados por células mononucleares, degeneración neuronal y gliosis. En ocasiones, pueden observarse inclusiones intracitoplasmáticas en astrocitos. También puede verse hipertrofia de los vasos sanguíneos. Es muy característica de esta forma la necrosis laminar cortical. La PEM se da en corteza cerebral, núcleos basales, tronco encefálico y médula espinal. La LEM tiene predilección por los pedúnculos cerebelosos, tractos ópticos, fórnix hipocampal y sustancia blanca medular. En esta forma se observa desmielinización sin inflamación (figura 2). A las 4-5 semanas posinfección puede observarse encefalomielitis necrotizante no supurativa que sigue a la desminelinización de la fase anterior.
Figura 2. Desmielinización y espongiosis en la sustancia blanca cerebelar en un perro con moquillo (H/E x15). Cortesía Martí Pumarola (Servei Diagnòstic de Patología Veteriànria, UAB). |
Si el animal presenta convulsiones debe utilizarse fenobarbital entre 2-5 mg/kg/12 h. por vía intravenosa, intramuscular u oral. Si se presenta en status epilepticus se utiliza el protocolo establecido para este tipo de urgencia. La dexametasona a dosis única (2,2 mg/kg i.v) ha mostrado cierto éxito, aunque transitorio, en el tratamiento del edema cerebral. También se han descrito corticoesteroides en el tratamiento de la neuritis óptica con resultados muy variables. Se ha visto que la ribavirina puede inhibir la replicación in vitro del virus.
La inmunidad después de la infección natural o de la vacunación puede persistir, al menos, durante 3 años. El 97% de la inmunidad de la madre frente al virus del moquillo canino se traspasa mediante calostro y puede durar hasta 8 semanas. Los cachorros que no han recibido calostro tienen inmunidad hasta la primera-cuarta semana de vida.
Actualmente se utilizan vacunas vivas modificadas para la inmunización, ya que proporcionan una protección mucho más duradera que las vacunas de antígeno inactivado. Estas últimas se usan en animales salvajes o exóticos. La desventaja de las vacunas vivas inactivadas es la posibilidad de inducir encefalitis posvacunal en cachorros entre los 3-20 días de la vacunación. Suelen ser animales inmunosuprimidos y presentan convulsiones generalizadas, movimientos repetitivos de la mandíbula con sialorrea, para/tetraparesia, signos vestibulares o medulares.
Se ha descrito la utilización de la vacuna del sarampión para conseguir protección contra el moquillo, ya que son dos virus muy parecidos antigénicamente. En comparación con las vacunas específicas de moquillo, la del sarampión parece que no produce una tasa de anticuerpos tan elevada. Otro inconveniente es que con ésta estamos introduciendo en la sociedad un posible patógeno humano.
Existen diversos motivos por los que un animal vacunado de moquillo puede manifestar igualmente signos de infección: mal manejo en el transporte y refrigeración de las vacunas, cirugías, tratamiento con glucocorticoides e infección con parvovirus concomitante.
http://argos.portalveterinaria.com/
Bibliografía
Greene C.E, Appel M.J. Canine Distemper. Infectious diseases of the dog and cat, third edition. Pg.25-41. Saunders-Elsevier, 2006.
Maretlla V, Elia G, Buonavoglia C. Canine distemper virus. Emerging and reemerging virases of dogs and cats, pg 787-798. Veterinary Clinics of North America, vol.38, nº4 July 2008.
Nghiem P.P, Schatzberg S.J. Conventional and molecular diagnostic testing for the acute neurologic patient. Journal of Veterinary Emergency and Critical Care 20(1)2010, pg 46-61.
Schatzberg S.J, Nghiem P.P. Infectious and inflammatory diseases of the CNS, pg 341-62. Small Animal Neurological Emergencies (S.Platt, L.Garosi). Manson publishing 2012.
Summers B.A, Cummings J.F, de Lahunta A. Inflamatory diseases of the central nervous system, pg 102. Veterinary neuropathology. Mosby 1995.
Zurbriggen A, Vandevelde M. The pathogenesis of nervous distemper. Progress in veterinary neurology, Vol.5, nº3, 1994. pg109-115.
Eclampsia o fiebre de la leche en la perra lactante, ¿cómo prevenir?
La eclampsia es una carencia importante de calcio de la perra que amamanta y se reconoce por la fiebre, un nerviosismo inusual y espasmos cuando la enfermedad se agrava
La eclampsia, o fiebre de la leche, es una grave enfermedad que sufren las hembras lactantes cuando no tienen suficiente calcio en su sangre. También la padecen algunas perras preñadas, antes incluso de parir a sus cachorros. Es crucial aprender a reconocer la eclampsia en la perra, con síntomas como la fiebre, las convulsiones y problemas al andar, ya que, si no se detecta a tiempo, esta dolencia puede provocar la muerte de nuestra perra.
http://www.tuveterinario.info/
Esta enfermedad aparece cuando la producción de leche materna aumenta para poder alimentar a las crías y entonces se produce una bajada de los niveles de calcio en la sangre de la madre, originándose dicho proceso.
Cuando tengamos alguna perrita de raza pequeña que acabe de parir, debemos tener controlado este proceso pues puede presentarse en cualquier momento entre el parto y hasta que termine la lactancia.
Cuando se presenta este proceso lo primero que podemos apreciar en la perrita afectada es que está como nerviosa, con jadeos, ptialismo ( aumento en la producción de saliva), temblores, estado de debilidad, etc.
Una vez que se empieza a notar esto, la evolución de la enfermedad es rápida y empiezan a aparecer contracciones, movimientos tónico-clónicos ( convulsiones), la perrita no puede tenerse en pie, aumenta la intensidad de las convulsiones y aumenta el riesgo de muerte debido a la presentación de shock y edema cerebral.
SIEMPRE que tengamos alguna duda sobre la presencia de este proceso en nuestra perrita ( recordad que este proceso sólo se presenta en perras que están dando de mamar a sus crías), es urgente contactar con vuestro veterinario de confianza pues es imprescindible poner tratamiento cuanto antes.
Ya hablábamos cuando tratamos de la epilepsia de que si los ataques se prolongaban en el tiempo, había lo que se llama un estatus epiléptico, el perro requería tratamiento de urgencia. Pues en este caso se trata de lo mismo y hay que poner remedio cuanto antes y eso hay que hacerlo en la clínica pues no hay ninguna pastilla que se le pueda dar a nuestro perro para solucionar el problema.
En el tratamiento hay que actuar a varios niveles. Por un lado hay que retirar a los cachorros para impedir que sigan mamando; hay que reponer las tasas de calcio en sangre con una muy cuidadosa suplementación intravenosa; controlar también la glucemia para evitar su descompensación.
Una vez solucionada la crisis hay que retirar permanentemente a los cachorros y darles una alimentación artificial. A día de hoy las leches maternizadas para perros tienen una calidad inmejorable y no debe asustarnos el utilizarlas. También debemos aportar a la perra una buena dieta con un aporte de calcio y vitamina D.
Cuando tenemos una perra de raza pequeña que está preñada, podemos intentar prevenir este problema dando al final de la gestación, en el último tercio, un pienso adecuado y un buen aporte ded calcio y mantener esto durante toda la lactación. Esto no evita con total seguridad que se presente la tetania por lo que no debemos descuidar la vigilancia de nuestra perrita durante la lactación.
Entre los problemas que pueden presentarse en la matriz de la perra podemos citar los siguientes:
Manuel Olivares Martín, veterinario de la Clínica Veterinaria OLIVARES- Problemas de retención fetal o retención placentaria:
Aquí se trata de que algún feto quede retenido en la matriz y que con su descomposición pueda originar una infección de la matriz. También pueden quedar restos placentarios retenidos. La placenta de los cachorritos suele expulsarse normalmente sobre un cuarto de hora tras la salida del feto. Si no se produce su salida puede originar problemas tales como una endometritis.
Normalmente el diagnóstico de estos procesos requiere el estudio por imagen ( radiografía y/o ecografía) por parte de vuestro veterinario de confianza.
Los problemas de retención placentaria pueden intentar resolverse con tratamiento médico, siempre bajo supervisión veterinaria y, si no se soluciona, se procede a un tratamiento quirúrgico (histerectomía). A veces la retención no origina problemas, al menos a corto y medio plazo, y el propietario no se apercibe de que existe esa retención, pero si lo sabemos a ciencia cierta, mejor instaurar tratamiento que esperar a tener un problema ya establecido.
- Prolapso de la matriz:
Que, al igual que en el caso de la gata, no es frecuente. Puede ocurrir durante el parto o justo tras él. Si la parte prolapsada no es muy grande, no está muy dañada y no se presentan hemorragias, se puede intentar su recolocación, que puede ser externa o, si no se puede, mediante cirugía. Si los daños son severos o no se consigue su recolocación, se procede a la extirpación quirúrgica de la matriz prolapsada (histerectomía).
- Procesos hemorrágicos:
Pueden deberse desgarros en la matriz producidos durante el parto, hemorragias en la zona de implantación placentaria o problemas de la coagulación en la perra. Se puede intentar tratamiento médico ( bajo supervisión veterinaria) y, si no se puede controlar o el daño es severo, se aconseja la cirugía para extirpar matriz y ovarios ( ovariohisterectomía).
Hay que recordar que tras el parto la perra presentará una descarga vulvar de aspecto verdoso sanguinolento y que es completamente normal. Esta descarga puede mostrarse hasta por un periodo de mes y medio a dos meses tras el parto. Si se prolonga en el tiempo o si adquiere tonalidad marrón o purulenta debemos contactar con nuestro veterinario pues puede estar originándose algún proceso patológico.
- Procesos infecciosos:
Tras el parto puede producirse una infección, sobre todo si ha habido abortos, problemas en el parto que hayan dado lugar a la manipulación del canal del parto, etc. La perra presentará una descarga vulvar de aspecto sucio y con mal olor, tendrá un cuadro febril con falta de apetito, temperatura elevada, apatía. También puede rechazar a los cachorros y deja de haber producción láctea.
Dependiendo del origen del proceso, además de instaurar un tratamiento sintomático y antibiótico, a veces hay que recurrir a la cirugía para extraer la matriz.
En los procesos infecciosos de este tipo es imprescindible retirar a los cachorritos y proceder a su alimentación mediante leches maternizadas, de las que hay varios tipos en el mercado.
Otro tipo de problemas que pueden presentarse tras el parto van a tener relación con el tejido mamario. Entre estos problemas podemos citar:
- Falta de producción láctea (agalaxia):
No es muy frecuente. Normalmente la “bajada de la leche” se produce un poco antes o en el momento del parto, aunque a veces se produce hasta con dos semanas de antelación. Cuando no hay producción láctea, esto puede deberse a que hay un parto prematuro , que se haya tenido que realizar una cesárea a la perra, enfermedades concurrentes debilitantes, procesos infecciosos, etc. Es importante en estos casos tener leche maternizada preparada para alimentar a los cachorros desde los primeros momentos. A veces no hay producción láctea pero enseguida se estimula cuando los cachorros empiezan a mamar, por lo que hay que estar al tanto de este problema pero no ir muy rápido a la hora de empezar con leche artificial, que sólo usaremos si se ve que los cachorros intentan sacar leche y no lo consiguen.
- Procesos inflamatorios en las mamas:
Estos procesos se producen cuando hay una intensa producción láctea días antes de que se presente el parto. También puede deberse a que la camada sea muy corta y no se usen todas las mamas para la alimentación de los cachorros. Otra causa puede ser la presencia de anomalías en los pezones que impidan la lactación. Se pueden poner paños calientes y masajear las mamas para ver si se consigue que salga leche. Si la retención es intensa puede producirse gran dolor y esto, a su vez, hará que la perra no quiera que los cachorros mamen. Normalmente se debe recurrir a la alimentación artificial de los cachorritos y al uso de medicamentos para retirar la producción láctea.
- Procesos infecciosos en las mamas:
Las infecciones mamarias pueden tener su origen por vía sanguínea o por una entrada a través de los pezones. Estos procesos originan una inflamación dolorosa y hay que instaurar tratamiento antibiótico pertinente.
Dependiendo del número de mamas afectadas puede ser necesario el retirar la lactación a los cachorros y alimentarlos de forma artificial, usar antibióticos y medicamentos para retirar la producción láctea.
Si hay sólo una mama afectada se puede poner una gasa y esparadrapo que impida la lactación de esa mama y que los antibióticos que se usen no sean perjudiciales para los cachorritos, que pueden seguir alimentándose de las otras mamas.
Por último citaremos el caso de la tetania postparto o eclampsia puerperal, problema bastante frecuente, sobre todo en razas pequeñas y miniatura, en las que, sobre las dos semanas postparto y debido al aumento de la lactación, origina una bajada de las tasas de calcio en sangre y esto va a originar este cuadro nervioso del que ya hemos hablado con anterioridad.
- Puede presentarse inquietud, aumento del jadeo, salivación, debilidad,
Va evolucionando a cuadros de contracciones musculares y convulsiones, taquicardia, elevación térmica y, por último, estado de shock y muerte si no se pone tratamiento con urgencia ( el cual SIEMPRE debe instaurarse por un veterinario y controlando la evolución del cuadro en la clínica).
Más información sobre reproducción de la perra
Queremos recordaros que en la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) ponemos a vuestra disposición nuestro Servicio de Urgencias 24 horas y nuestro teléfono de consulta, también operativo 24 horas, para que podáis resolver todas vuestras dudas sobre este o cualquier otro tema relacionado con la salud y cuidados de vuestros animales.
Manuel Olivares Martín, veterinario de la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) y de www.tuveterinario.info
Calendario de vacunaciones para tu perro |
Quien mejor puede aconsejar la pauta vacunal de un cachorro o perro es el veterinario, ya que analizará las características individuales de cada perro y escogerá la que más le proteja.
Es importante vacunar a los cachorros y a los perros adultos correctamente contra las enfermedades más comunes: Parvovirosis, Moquillo, Hepatitis, Leptospirosis, Tos de las Perreras, enfermedad de Lyme, Coronavirus y Rabia. El tipo de vacuna y pauta de la vacunación dependerá de:
– Si el cachorro tiene 6 semanas: vacuna sencillita frente a Parvovirosis y Moquillo y 2 polivalentes. – Si tiene 2 meses o más: se ponen 2 polivalentes separadas por 3-4 semanas. En primovacunación conviene poner al menos 2 dosis, y repetirla 1 vez al año.
El Pastor Alemán, Rottweiler, Bóxer y Pit Bull, entre otras, presentan un elevado riesgo de padecer Parvovirosis, Moquillo y Coronavirus, por lo que deben ser vacunados especialmente contra estas enfermedades víricas.
Es importante para las defensas del cachorro que la madre esté correctamente vacunada y desparasitada. También influye, lógicamente, que tanto él como su madre estén bien alimentados, con un peso corporal correcto: así su estado inmunológico será mejor y, en caso de infección vírica o bacteriana, podrá hacer frente a dichas infecciones. Los cachorros o perros con un deficiente estado inmunológico deberán seguir unas pautas vacunales más completas para poseer suficientes defensas.
Determinadas áreas geográficas presentan una mayor prevalencia de enfermedades tales como Moquillo, Parvovirosis,… En zonas rurales, en las que no todos los animales están vacunados adecuadamente, o en áreas en las que existen perros asilvestrados, el riesgo de enfermedades víricas es mayor, y la vacunación debe ser más completa.
Los cachorros o perros que convivan con otros perros (criaderos, residencias), acudan a exposiciones de belleza o de agility, los que se dediquen a cría o a la caza, presentan un mayor riesgo de contraer enfermedades víricas por lo que su vacunación debe ser estricta y completa, incluyendo especialmente la vacuna frente a la tos de las perreras. Los perros que habiten en zonas en las que el riesgo de infección por garrapata sea elevado, deberán ser vacunados contra la Enfermedad de Lyme. Existen varias pautas de vacunación, por lo que lo mejor es que te informe el veterinario. En rasgos generales, podríamos recomendar el siguiente calendario vacunal, pero recordemos que cada perro puede requerir vacunaciones adicionales:
Tu precioso cachorro acaba de llegar, estás deseando bajarlo al parque y enseñárselo a tus amigos y conocidos. ¡Cuidado! Debes evitar el contacto con otros perros hasta que haya recibido todas las vacunas y esté protegido. Al sacarlo y ponerlo en contacto con otros perros, o lugares frecuentados por éstos, estará expuesto a enfermedades y por el momento no está inmunizado. Por otro lado para que se socialice bien, debe estar en contacto con el mundo exterior, para acostumbrarse a la gente y al ruido de la calle, pero evita en todo momento exponerlo innecesariamente. Por supuesto si puedes pasearlo en brazos o llevarlo a un jardín particular donde no haya perros no vacunados. |
El perro o perro doméstico (Canis lupus familiaris) es un mamífero carnívoro de la familia de los cánidos, que constituye una subespecie del lobo (Canis lupus).
Valores orientativos caninos |
---|
Temperatura corporal:
|
Frecuencia respiratoria:
|
Frecuencia cardíaca:
|
Duración del crecimiento:
|
Período de vejez:
|
Un estudio publicado por la revista de divulgación científicaNature revela que, gracias al proceso de domesticación, elorganismo del perro se ha adaptado a cierta clase de alimentos, en este caso el almidón. Su tamaño o talla, su forma y pelaje es muy diverso según la raza. Posee unoído y olfato muy desarrollados, siendo este último su principal órgano sensorial. En las razas pequeñas puede alcanzar una longevidad de cerca de 20 años, con atención esmerada por parte del propietario, de otra forma su vida en promedio es alrededor de los 15 años.
Se cree que el lobo gris, del que es considerado una subespecie, es el antepasado más inmediato. Las pruebas arqueológicas demuestran que el perro ha estado en convivencia cercana con los humanos desde hace al menos 9000 años, pero posiblemente desde hace 14 000 años. Las pruebas fósiles demuestran que los antepasados de los perros modernos ya estaban asociados con los humanos hace 100 000 años. Las investigaciones más recientes indican que el perro fue domesticado por primera vez en el este de Asia, posiblemente en China; sin embargo, es incierto si todos los perros domésticos provienen de un mismo grupo o si el proceso de domesticación se repitió varias veces.
Hay aproximadamente 800 razas —más que de cualquier otro animal— que varían significativamente en tamaño, fisonomía y temperamento, presentando una gran variedad de colores y de tipos de pelo según la raza de perro. Tienen una gran relación con los humanos, para quien son animales de compañía, animales de guardia, perros de trabajo, perros de caza, perros de aguas, galgos de carrera, perros guía, perros pastores o perros boyeros por ejemplo. En 2001, se estimaba que había 400 millones de perros en el mundo
Ancestros e historia de la domesticación
En el siglo XXI, los investigadores han alcanzado un consenso casi absoluto acerca de que es muy posible que ladomesticación del perro empezara más por la adaptación espontánea de este al acercarse a vivir junto al hombre que por la voluntad humana.8 Esto se debe a que vivir junto al hombre siempre fue ventajoso para el cánido. Un perro viviendo en una comunidad humana, aún en la Antigüedad, podía alimentarse con menos esfuerzo que uno salvaje, podía vivir en mejores condiciones disfrutando del afecto y cuidado humano.
El perro es una subespecie doméstica del lobo, según la comparación de los mapas genéticos de ambas especies. La evidencia fósil más antigua de un perro domesticado fue encontrada en 2008 en la cueva Goyet de Bélgica, correspondiente a unos 31.700 años y al parecer asociado a la cultura auriñaciense. Hasta entonces las pruebas más antiguas se habían encontrado en Rusia, pertenecientes a hace 14.000 años (Eliseevich). El hombre consiguió domesticar a ejemplares de lobos, o, más probablemente, se demostró incapaz de impedir que los lobos se introdujeran en sus aldeas y tuvieran allí a sus cachorros. El perro era útil como ayuda en la caza y para defender al grupo y su morada. Poco a poco, el hombre los adaptó a sus necesidades, creando diferentes razas para las distintas labores y características ambientales y geográficas.
El ser humano se dio cuenta rápidamente de los finos sentidos del olfato y el oído que tenía el perro;[cita requerida] su olfato es más potente que del humano —su área olfatoria es 20 veces más gruesa, y en el caso del pastor alemán con una superficie 34 veces mayor y con 40 veces más células olfatorias— y su oído es capaz de percibir sonidos muy por debajo y por encima del rango que oyen los humanos. Ventaja ésta que aumenta su utilidad para la caza y las labores de guarda. Su uso como pastor y protector de los rebaños es bastante posterior, yendo pareja a la domesticación y explotación de otros animales. Animal de costumbres sociales, que convive en grupos perfectamente jerarquizados, se adaptó a convivir con los humanos.
Los perros son muy valorados por su ayuda en la caza. Los perros enterrados en el cementerio mesolítico de Svaerdborg en Dinamarca muestran que, en la antigua Europa, eran ya una valiosa compañía.
Los perros han acompañado al hombre en su proceso a la civilización; su presencia está probada en todas las culturas del mundo, así en Perú en la etapapreincaica, los mochicas los usaban como ayuda de caza y también como mascotas en casa. En el entierro del Señor de Sipán, se encontraron dentro de las tumbas restos de un perro que seguramente se usó en la caza, ya que el cráneo tenía perfectamente desarrollados sus molares.
El cráneo y los dientes del perro doméstico han disminuido de tamaño con relación al lobo al no necesitar matar presas grandes. Así mismo, al pasar de una dieta de carne a una constituida por los desechos provenientes de la alimentación de los humanos, desarrollaron cerebros más pequeños que requieren menos calorías y menos proteínas para su crecimiento y sustento. La percepción del perro por parte del ser humano ha variado y varía según las culturas, en varias etnias americanas anteriores a 1492, tal y como aún ocurre en zonas del Extremo Oriente Asiático, los perros eran usados directamente como alimento; en zonas del Oriente Medio el perro ha sido asociado por su aspecto con los chacales —de hecho científicamente se creyó hasta el desarrollo de la genética a fines del siglo XXque los perros comunes de todo el mundo eran descendientes de chacales— y al ser los chacales animales principalmente carroñeros, los perros también han sido considerados impuros en esa zona. Quizás la única especie de perro que no desciende del lobo es el perro fueguino que descendería del culpeo.
Características
Diferencias respecto a otros cánidos
En comparación con lobos de tamaño equivalente, los perros tienden a tener el cráneo un 20% más pequeño y el cerebro un 10% más pequeño, además de tener los dientes relativamente más pequeños que otras especies de cánidos. Los perros requieren menos calorías para vivir que los lobos. Su dieta de sobras de los humanos hizo que sus cerebros grandes y los músculos mandibulares utilizados en la caza dejaran de ser necesarios. Algunos expertos piensan que las orejas flácidas de los perros son el resultado de la atrofia de los músculos mandibulares. La piel de los perros domésticos tiende a ser más gruesa que la de los lobos y algunas tribus esquimales prefieren su piel para vestirse, debido a su resistencia al desgaste en un clima inhóspito.11 A diferencia de los lobos, pero al igual que loscoyotes, los perros domésticos tienen glándulas sudoríparas en las almohadillas de las patas. Las patas de un perro son aproximadamente la mitad de las de un lobo y su cola tiende a curvarse hacia arriba, otro rasgo que no se observa en los lobos.
Anatomía externa
Diagrama de la anatomía general de un perro:
La enorme variedad de morfologías en las diferentes razas de perro hace difícil determinar el Canis lupus familiaristamaño y el peso medios de los perros. Con una altura de entre 71 y 90 cm, el galgo irlandés es la raza más alta de perro —aunque algunos ejemplares de gran danés superan este tamaño, llegando hasta 107 cm—.
La raza más pequeña de perro es elchihuahua, con un tamaño de 15-25 cm en la cruz. Con un peso medio de entre 1,5 y 3 kilogramos —y que en algunos casos, puede no superar los 500 g—,15 los chihuahuas también son los perros más ligeros, los mastines ingleses y los san bernardos son los perros más pesados, con un peso que puede llegar a más de 75 ú 80 kg.
La longevidad de los perros varía de una raza a otra, pero en general las razas más pequeñas viven más tiempo que las más grandes. Los perros más pequeños a menudo viven hasta la edad de quince o dieciséis años, mientras que los perros más grandes pueden tener una esperanza de vida de sólo la mitad. En medio se encuentran todas las razas intermedias. El perro más viejo del que se tiene constancia, un Boyero australiano llamado Bluey, murió en el año 1939 a la edad de veintinueve años. La esterilización del animal puede prolongar o acortar su vida, reduciendo el riesgo de contraer enfermedades como piometría en la hembra o cáncer testicular en el macho. También reduce el riesgo de accidentes y heridas, pues los perros no esterilizados se pelean y se escapan más. Por otro lado, la castración del macho favorece la aparición de cáncer de próstata, una enfermedad que puede acortar drásticamente la vida del animal.
Pelaje
Al igual que los lobos, los perros tienen un pelaje, una capa de pelos que los cubre el cuerpo. El pelaje de un perro puede ser un «pelaje doble», compuesto de una capa inferior suave y una capa superior basta. A diferencia de los lobos, los perros pueden tener un «pelaje único», carente de capa inferior. Los perros con un pelaje doble, como los lobos, están adaptados para sobrevivir en temperaturas frías y tienden a provenir de climas más fríos.
Los perros suelen presentar vestigios de contrasombreado, un patrón de camuflaje natural común. La base general del contrasombreado es que un animal iluminado desde arriba aparece más claro en la mitad superior y más oscuro en la mitad inferior, donde normalmente tiene su propio color. Este es un patrón que los predadores pueden aprender a reconocer. Un animal contrasombreado tiene una coloración oscura en la superficie superior y una coloración oscura en la inferior. Esto reduce la visibilidad general del animal. Un vestigio de este patrón es que muchas razas tienen un lado, una raya o una estrella de pelaje blanco en el pecho o en la parte inferior.
Cola
Hay muchas formas diferentes de cola de perro: recta, recta hacia arriba, forma de hoz, rizada o en tirabuzón. En algunas razas, la cola es cortada tradicionalmente para evitar heridas, especialmente en los perros de caza. En algunas razas, algunos cachorros nacen con una cola corta o sin cola. Esto sucede más a menudo en ciertas razas, especialmente en aquellas en las que a menudo se corta la cola y que por tanto no tienen estándar de raza en cuanto a la cola.
Aparato locomotor
Como la mayoría de mamíferos predadores, el perro tiene músculos potentes, un sistema cardiovascular que permite una alta velocidad y una gran resistencia y dientes para cazar, aguantar y desgarrar las presas.
El esqueleto ancestral de los perros les permite correr y saltar. Sus patas se han desarrollado para impulsarlos rápidamente hacia delante, saltando cuando es necesario, con el fin de cazar y atrapar las presas. Por tanto, tienen pies pequeños y apretados y caminan sobre los dedos (digitígrados). Sus patas traseras son bastante rígidas y sólidas, mientras que las anteriores son laxas y flexibles, estando unidas al tronco únicamente por músculos.
Aunque la cría selectiva ha cambiado la apariencia de muchas razas, todos los perros conservan los elementos básicos de sus antepasados. Los perros tienenomóplatos desconectados —carecen de clavícula— que permiten hacer zancadas más largas. La mayoría de razas conservan las garras vestigiales —espuelas— en las patas anteriores y a veces en las posteriores. Algunas de estas razas, como el perro pastor catalán, pueden presentar un espolón doble en una o más patas. En algunos casos, se les quitan esas garras para evitar que el animal se las arranque sin querer durante la persecución de una presa, pero esta práctica es ilegal en algunos países.
Sentidos
Los sentidos del olfato y del oído del perro son superiores a los del humano en muchos aspectos. Algunas de sus habilidades sensoriales han sido utilizadas por los humanos, como por ejemplo el olfato en los perros de caza, perros buscadores de explosivos o perros buscadores de drogas.
Vista
La visión del perro parece adaptada para la caza: No tiene gran agudeza visual de detalles, pero tienen excelente percepción de movimientos. Tiene excelente visión nocturna o crepuscular, debido al el uso del tapetum lucidum, una pantalla reflectiva dentro del ojo. El campo visual del perro se encuentra entre los 240 – 250 grados, mucho mayor que el humano que es de aproximadamente 180 grados.
La visión del perro es sensible a los objetos en movimiento o con desplazamiento repentino, y cuenta con una excelente visión nocturna o crepuscular.
Tienen una forma de visión dicromática llamada deuteranopia que en los humanos se considera una forma de daltonismo que afecta el rojo y el verde. Los perros perciben tonalidades de amarillo y de azul, pero al rojo lo perciben amarillo y al verde lo ven gris.
Su sistema visual se ha desarrollado para ayudarles en la caza. Aunque es difícil de medir, la agudeza visual de los caniches ha sido estimada como equivalente a una puntuación en el test de Snellen de 20/75. Sin embargo, la discriminación visual es muy superior cuando se trata de objetos en movimiento. Se ha demostrado que los perros son capaces de distinguir su dueño de otras personas a distancias de más de un kilómetro y medio. Como cazadores crepusculares dependen de su visión en condiciones de poca iluminación. Para ayudarles a ver en la oscuridad tienen pupilas muy grandes, una mayor densidad de bastoncillos en la fóvea óptica, una mayor velocidad de parpadeo y un tapetum lucidum refractivo. El tapetum es una superficie refractiva situada detrás de la retina que refleja la luz para dar a los fotorreceptores una segunda oportunidad de captar los fotones. Aunque estas adaptaciones sirven para mejorar la visión en la oscuridad, también reducen la agudeza visual de los perros.
Como la mayoría de mamíferos, los perros son dicromatos y tienen una visión en color equivalente al daltonismo rojo-verde en los humanos. Las diferentes razas caninas tienen diversas formas y tamaños de los ojos y también tienen una configuración distinta de la retina. Los perros con el hocico largo tienen una «raya visual» que se extiende por el ancho de la retina y que les da un campo muy amplio de visión excelente, mientras que los perros con el hocico corto tienen una área centralis, una región central con hasta tres veces la densidad de terminaciones nerviosas de la «raya visual», que los provee una vista detallada, mucho más similar a la de los humanos.
Algunas razas, particularmente los galgos, tienen un campo de visión de hasta 270°, aunque las razas de cabeza ancha con el hocico corto tienen un campo de visión mucho más estrecho, tan bajo como 180°, similar al de los seres humanos. Algunas razas también presentan una tendencia genética a la miopía. Aunque la mayoría de razas son memmetrópicas, se ha descubierto que uno de cada dos rottweilers son miopes.
Oído
El campo de audibilidad de los perros es aproximadamente de 40 Hz a 60.000 Hz.28 Detectan sonidos tan graves como 16-20 Hz —en comparación con 20-70 Hz en los humanos— y también por encima de 45 kHz29 —en comparación con 13-20 kHz en los humanos—, y además tienen un grado de movilidad de las orejas que les permite determinar rápidamente el origen exacto de un sonido. Dieciocho o más músculos pueden inclinar, rotar, levantar o bajar las orejas de un perro. Además, puede localizar el origen de un sonido mucho más rápido que un humano y detectar sonidos a una distancia hasta cuatro veces mayor que los humanos. Los perros con una forma de la oreja más natural, como las orejas de cánidos salvajes como el zorro, suelen oír mejor que los perros con las orejas más flexibles típicas de muchas razas domésticas.
Olfato
Mientras que el cerebro humano es dominado por una gran corteza visual, el cerebro canino es dominado principalmente por una corteza olfativa. El bulbo olfativo de los perros, en proporción al tamaño total del cerebro, es unas cuarenta veces mayor que el de los humanos. Según la raza, los perros tienen entre 125 y 220 millones de células olfativas extendidas sobre un área del tamaño de un pañuelo de bolsillo —en comparación con 5 millones de células extendidas sobre el área de un sello en los humanos. Los bloodhound son la excepción, con aproximadamente 300 millones de receptores olfativos. Los perros pueden distinguir olores a concentraciones casi 100 millones de veces inferiores a las que pueden distinguir los humanos.
Gusto
Entre los sentidos caninos, el del sabor es el que menos se ha investigado y a menudo se le ha relacionado con el olfato. Los perros pueden distinguir los sabores básicos de manera similar a los humanos, aunque casi no distinguen el salado.33 Sin embargo, los gustos preferidos pueden diferir mucho de un perro a otro, pues parece que no eligen la comida según el tipo de gusto, sino según su intensidad —fuerte sabor / gusto suave—. Los primeros meses de la vida de un cachorro son bastante importantes en este sentido ya que suelen probar muchos sabores diferentes cuando son jóvenes también desarrollarán un gusto por la variedad cuando sean adultos.
Al igual que los humanos y que muchos otros animales, los perros tienen la capacidad de asociar determinados gustos con los problemas de salud. Si un alimento los hace enfermar o hace que se encuentren mal, tenderá a evitar el sabor de este alimento en el futuro.
Esto forma parte de un mecanismo de defensa instintivo, que protege a los animales de envenenarse por la ingestión frecuente de sustancias tóxicas.
Tacto
Los perros utilizan el sentido del tacto para comunicarse entre ellos y con otras especies. Si se hace apropiadamente, tocar un perro puede servir para estimularlo o relajarlo. Se trata del primer sentido que se desarrolla en los cachorros recién nacidos y las perras comienzan a lamer y acariciar sus crías poco después del nacimiento. Algunos estudios han sugerido incluso que los perros pueden detectar movimientos en el abdomen de la madre incluso antes de nacer y que las perras que son mimadas durante la gestación dan a luz crías más dóciles. Los perros tienen sensores táctiles en todo el cuerpo, pero los cojinetes, la columna vertebral y la región de la cola son algunas de las zonas más sensibles.
Las vibrisas de los perros presentan mecanoreceptores que les sirven para adquirir información táctil de su ambiente, pero esta función no es tan importante como lo es en los gatos. Entre otras cosas, sirven para sentir el flujo del aire. Además del hocico, donde reciben el nombre de «bigotes», los perros tienen vibrisas encima de los ojos y debajo de la mandíbula.
Comportamiento
Inteligencia
Los perros son apreciados por su inteligencia. La inteligencia canina se refiere a la habilidad de un perro de procesar la información que recibe a través de sus sentidos para aprender, adaptarse y resolver problemas. La etología cognitiva es la disciplina que se encarga de estudiar está área dentro de la cognición animal.
Algunos estudios de antropología evolutiva se centran también en la identificación de las capacidades cognitivas especiales que el perro posee, y que ha desarrollado debido a su estrecho contacto con el ser humano; como es la habilidad de reconocer un vocabulario extenso.
En un ejercicio para observar su nivel de comprensión pasivo del vocabulario humano, se le pidió a un humano sentado detrás de una barrera transparente que sostuviera un juguete, y con voz monótona, le diera al perro la orden «trae» (bring). El perro se dirigió a un círculo en donde estaban dispersos diferentes objetos —desde un juguete exactamente igual al que el humano solicitó, hasta otro tipo de cosas con texturas y olores diferentes—, el animal observo por un momento el círculo de objetos para dirigirse a por el juguete exacto que se le había pedido y después presentarlo al humano.
También se le pidió que trajera determinados objetos utilizando solamente la fotografía o réplica en miniatura del objeto. El estudio fue complementado con dos condiciones de control adicionales para evitar que el animal actuará por preferencias pre-establecidas. El ejemplar utilizado —border collie— pudo reconocer hasta 200 palabras del vocabulario humano.
La habilidad de aprender rápido ha sido utilizada como uno de los parámetros para medir la inteligencia entre las razas caninas, otras pruebas tienen que ver con el deseo y la habilidad de responder ante diversas situaciones. Los perros guías, por ejemplo, deben aprender un número enorme de órdenes, entender cómo comportarse en una gran variedad de situaciones y reconocer riesgos o peligros a su compañero humano —frente a alguno de los cuales nunca se han enfrentado con anterioridad—, actuando incluso bajo el comportamiento conocido como desobediencia inteligente que significa que el animal de asistencia irá en contra del deseo de su dueño para evitar una decisión equivocada
Ciertas razas han sido continuamente seleccionadas a lo largo de cientos o miles de años por su capacidad de rápido aprendizaje, mientras que en otras razas, esta cualidad ha sido relegada en favor de otras características, como son: la habilidad de correr, perseguir, cazar o de pelear con otros animales. Sin embargo, la capacidad de aprender obediencia básica —y eventualmente comportamientos complejos— es inherente en todos los perros. Aún el perro más tímido o distraído responde más fácilmente al entrenamiento que, por ejemplo, un gato. Los propietarios deben ser simplemente más pacientes con algunas razas que con otras.
Socialización
También en los perros, el término socialización se utiliza para caracterizar el proceso por el cual el animal se relaciona con su entorno, conoce sus reglas, entiende la estructura social, y percibe los límites. Los perros jóvenes a menudo aprenden rápidamente cómo comportarse con otros miembros del grupo, ya sean perros o humanos. Los perros adultos modelan a sus cachorros mediante correcciones —auditivas o físicas— cuando no se comportan de la forma esperada, y con premios si tienen comportamientos aceptables —jugando con ellos, alimentándolos, limpiándolos, entre otros—.
El proceso de socialización se lleva a cabo especialmente de forma intensa durante los primeros meses de vida, y la primera etapa se extiende aproximadamente desde la tercera hasta la duodécima semana de vida. Tiempo en el que se basa la maduración de los órganos sensoriales y el desarrollo de las habilidades motoras.
Cuando son cachorros deberán experimentar:
- Interacción con otros perros (comunicación, aprendizaje de conductas de grupo).
- Interacción con otros animales (gatos, cobayas, pájaros, caballos).
- Interacción con seres humanos.
- Habituación a los estímulos ambientales, tales como; sirenas de automóviles, ruidos cotidianos en el hogar, aviones, sonidos estridentes —fuegos artificiales de Año Nuevo— y también acostumbrarse a las multitudes o tráfico pedestre.
La socialización canina se refiere tanto a la capacidad del perro de interaccionar con los seres humanos, como a su comprensión para comunicarse y relacionarse con otros perros.
Un perro bien socializado aprende a estar tranquilo y receptivo a la hora de hacer frente a los extraños, los niños, otras mascotas y situaciones no previstas. El desarrollo futuro de cada perro está determinado principalmente por su socialización y educación. Perros mal socializados tendrán dificultades para adaptarse a su entorno y tenderán a presentar conductas y actitudes temerosas o agresivas, junto con otros trastornos del comportamiento. Los procesos de socialización que no se producen en las primeras catorce semanas de vida no pueden ser sustituidos. Un cachorro sin socialización con catorce semanas de vida será muy difícil de educar y/o adiestrar.
En qué medida esto se traduce en trastornos de la conducta dependerá de la evaluación del perro de forma individual.
Debido a que son animales con tendencia a usar guaridas en el momento del parto y para criar a sus cachorros, pueden aprender fácilmente comportamientos como mantener su lugar limpio y aceptar estar en un área cerrada —como es el caso de una jaula temporal para transporte— u otro lugar cercado.
Problemas de comportamiento o anormales
Los trastornos de la conducta canina se clasifican en tres tipos:
1) patologías del desarrollo,
2) sociopatías —relacionadas con el ambiente y su jauría humana o animal,
3) comportamientos disfuncionales que alteran la conducta normal, y que se ajustan para hacer frente a una situación cotidiana (fobia). Según la tesis de zoopsiquiatría desarrollada por Patrick Pageat:
- Agresiones de tipo jerárquicas, territorial/maternal, por miedo, irritación, predatorias y redirigida.
- Destructivas, orina/defecaciones indeseadas, ansiedades, miedos y fobias (a la pirotecnia, por ejemplo),
- Trastornos compulsivos y estereotipias (persecución de cola, autolamido).
- Trastornos alimentarios y dípsicos (anorexia/bulimia, potomanía).
- Trastornos sexuales (hípersexualidad, pseudogestación), depresión de involución.
Cabe señalar también que muchas de las malas costumbres caninas son la muestra de comportamientos desarrollados por razones tales como: falta de actividad —como puede ser caminatas o deportes caninos—, ausencia de socialización, disciplina, entrenamiento o educación irresponsable por parte de los propios dueños.
Gruñido
Un estudio reciente en Budapest, Hungría, ha encontrado que los perros son capaces de saber el tamaño que otro perro tiene con sólo escuchar su gruñido. También que un gruñido específico es utilizado por los perros para proteger su comida. La investigación mostró que los perros no mienten sobre su tamaño, siendo esta la primera vez que una investigación ha puesto de manifiesto que los animales pueden determinar el tamaño de otro por el sonido que producen. La prueba utilizó imágenes de muchos tipos de perros, mostrando un perro pequeño, después uno grande y reproduciendo el gruñido de cada tipo. El resultado demostró que —20 de los 24 perros del ensayo— miraban primero a la imagen del perro de tamaño apropiado durante los períodos más largo de tiempo.
Interacción con los humanos
Los perros domésticos han heredado una jerarquía social y unos comportamientos sociales complejos de su antepasado, el lobo. Son animales que viven en grupo, con un conjunto complejo de comportamientos que determinan la posición de cada perro en la jerarquía social. Los perros presentan diversas posturas y otros medios de comunicación no verbal que revelan su estado mental.
Estas formas sofisticadas de cognición social y comunicación pueden explicar su adiestrabilidad, su gusto por el juego y su capacidad de integrarse en hogares y situaciones sociales humanas. Estos atributos han contribuido a que los perros creen una relación única con los humanos a pesar de ser predadores alfa potencialmente peligrosos.
Aunque los expertos no están muy de acuerdo sobre los detalles de la domesticación del perro, hay consenso que la interacción con los humanos jugó un rol significativo en la formación de la subespecie. Poco después de la domesticación, los perros estuvieron omnipresentes en las poblaciones humanas y se extendieron por el mundo. Los emigrantes de Siberiaprobablemente atravesaron el estrecho de Bering en compañía de perros y algunos expertos sugieren que el uso de perros de trineo podría haber sido vital para el éxito de las oleadas migratorias que llegaron a Norteamérica hace unos 12.000 años.
Los perros fueron una parte esencial de la vida de la población atabascana de Norteamérica. En muchos grupos, el perro era el único animal domesticado, y fue utilizado de nuevo por emigrantes atabascanos hace 1.400 años, cuando cargaron gran parte de las provisiones en las migraciones de las tribus apaches y navajos. El uso de los perros como animales de carga en estas culturas a menudo continuó después de la introducción del caballo en Norteamérica.
Interpretación de gestos y señales comunicativas humanas
En los últimos años existe evidencia que sugiere que las especies no-humanas pueden ser capaces de interpretar las acciones de otras especies.
En un estudio conducido por el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva en Alemania, se observó que los perros eran capaces de inferir la posibilidad de comida oculta observando el dedo de una persona, y siguiendo con la vista la dirección a donde apuntaba el dedo humano cuando se señalaba el lugar en donde estaba oculto el alimento del cual había sido eliminado el olor para evitar que el animal usará su olfato.
Contrario a los simios de género Pan que no reparaban ni en el señalamiento, ni seguían con la vista la dirección en donde apuntaba el dedo humano. Una de las conclusiones que se extrajeron es que los perros han desarrollado una competencia específica en el seguimiento de gestos, señales e interpretación de los patrones de comunicación humana.
Salud
Son susceptibles a diversas enfermedades, trastornos y venenos, algunos de los cuales afectan a los humanos de la misma manera y otros que son únicos a los perros. Como todos los mamíferos, son susceptibles a la hipertermia cuando hay niveles elevados de humedad y/o de temperatura.
La longevidad media de un perro varía mucho en función de la raza, y oscila entre 8 y 15 años, si goza de buena salud puede vivir hasta 20 años, o incluso más; el perro más longevo que se conoce llegó a los 29 años.
Las razas pequeñas suelen tener una esperanza de vida mayor que las grandes y las gigantes.
La salud canina, al igual que la humana, está relacionada con el tipo de vida que lleve —alimentación equilibrada, ejercicio físico, educación—, sobre todo durante los períodos de mayor vulnerabilidad: crecimiento, gestación, amamantamiento, trabajo y vejez.
Valores orientativos caninos |
---|
Temperatura corporal:
|
Frecuencia respiratoria:
|
Frecuencia cardíaca:
|
Duración del crecimiento:
|
Período de vejez:
|
En ocasiones es el médico veterinario quien recomienda qué tipo de vacuna se debe aplicar, es importante que el propietario tenga en conocimiento que en cuanto a aplicaciones víricas, funciona mejor en el organismo del animal una vacuna de virus atenuado o modificado, ya que este tipo de biológicos dan un incremento paulatino de anticuerpos, logrando una protección muy eficaz sin los efectos adversos postinoculación que pueden existir con la aplicación de una vacuna a virus activo; los efectos con este tipo de vacunas pueden ir desde simple fiebre y vómito hasta un choque anafiláctico o la muerte.
Enfermedades
Se ha sugerido que Obesidad en perros sea fusionado en este artículo o sección(discusión). Una vez que hayas realizado la fusión de artículos, pide la fusión de historiales aquí. |
Algunas razas de perro también son propensas a determinados trastornos genéticos, tales como la displasia de cadera, luxaciones rotulares, paladar leporino, ceguera o sordera. También son susceptibles a los mismos trastornos que los humanos, incluyendo la diabetes, la epilepsia, el cáncer y la artritis. La torsión gástrica y lameteorización son un problema serio en algunas razas de pecho ancho.
Las enfermedades infecciosas habitualmente asociadas con los perros incluyen la rabia (hidrofobia), el parvovirus canino y el bromo. Las enfermedades heredables de los perros pueden incluir una gran variedad, desde la displasia de cadera y las luxaciones rotulares mediales hasta epilepsias y el estenosis pulmonar. Los perros pueden contraer casi todas las enfermedades que afectan a los humanos —excepto aquellas que son específicas a la especie—, como el hipotiroidismo, cáncer, enfermedades dentales, enfermedades cardíacas, etc. Para protegerlos de muchas enfermedades comunes, a menudo los perros son vacunados.
Dos trastornos médicos graves que afectan a los perros son la piometría, que afecta hembras no esterilizadas de todas clases y edades y la meteorización, que afecta a las razas más grandes y los perros de pecho ancho. Ambos son trastornos agudos, que pueden matar rápidamente. Los dueños de perros susceptibles deberían conocer estos trastornos como parte de su cuidado de los animales.
Los parásitos externos más comunes del perro son la pulga, garrapata, ácaros, mientras que los internos son los gusanos anquilostomas, cestodos, nematodos y dirofilaris.
Los híbridos de primera generación —como esta mezcla de terrier— a menudo tienen una mejor salud que cualquiera de sus padres a causa del fenómeno genético de la heterosis, o «vigor híbrido».
El perro, al igual que el resto de seres vivos, es susceptible de enfermar; algunas de estas dolencias serán más propias de su especie, incluso con diversa incidencia en razas diferentes, mientras que otras son comunes a los humanos —cáncer, diabetes, entre otras—. El animal puede ser una fuente de contagio de determinadas enfermedades para el hombre, aunque la mayoría de ellas no se transmiten entre ambos; por ello, y por la propia salud de la mascota, es muy importante la correcta vacunación y desparasitación interna y externa regular; con ello, y unos hábitos higiénicos adecuados, el perro estará sano y fuerte.
Las enfermedades pueden tener un motivo vírico, bacteriológico, parasitario, genético o varios de ellos a la vez. Entre ellas pueden citarse:
- Alergias cutáneas
- Coronavirus
- Criptorquidia
- Diabetes
- Displasia de cadera
- Parásitos externos
- Epilepsia
- Parásitos intestinales
- Hepatitis canina
- Leptospirosis
- Moquillo o distemper
- Otitis infecciosa
- Parvovirosis
- Piómetra
- Piorrea
- Rabia
- Reumatismo
- Sarna
- Torsión gástrica
- Toxoplasmosis
Reproducción
En los perros domésticos, la madurez sexual (pubertad) comienza a producirse a la edad de entre seis y doce meses tanto en los machos como en las hembras,51 52 aunque en algunas razas de gran tamaño puede retrasarse hasta la edad de dos años. La adolescencia de la mayoría de los perros dura entre los doce y los quince meses de edad, a partir de los cuales ya son más adultos que cachorros. Como en el caso de otras especies domesticadas, ladomesticación ha favorecido una mayor libido y un ciclo de reproducción más temprano y frecuente en los perros que en sus antepasados salvajes. Los perros permanecen reproductivamente activos hasta edades avanzadas.
La mayoría de perras tienen su primer celo a la edad de entre seis y doce meses, aunque algunas razas grandes no lo tienen hasta la edad de dos años. Las hembras entran en celo dos veces por año, durante el cual su cuerpo se prepara para lagestación y al pico del cual entran en celo, el período durante el cual están mentalmente y físicamente receptivas a lacopulación. Como los óvulos sobreviven y pueden ser fertilizados durante una semana después de la ovulación, es posible que una hembra se aparee con más de un macho.
Las perras dan a luz 56-72 días después de ser fertilizadas,53 con una media de 63 días, aunque la duración de la gestación puede variar. Una camada promedio se compone de alrededor de seis cachorros. Las razas grandes tienen camadas más numerosas (un promedio de 8-12 crías), las razas medianas de 6 a 7 crías, y las razas pequeñas de 2 a 4 crías.
Debido a la cría selectiva algunas razas han adquirido rasgos que interfieren con la reproducción. Los machos de bulldog francés, por ejemplo, son incapaces de montar la hembra. En la gran mayoría de casos, las hembras de esta raza deben ser inseminadas artificialmente para que se reproduzcan y darán a luz a través decesárea.
Castración y esterilización
La esterilización es un proceso quirúrgico, que consiste normalmente en la extirpación de los testículos en los machos y los ovarios y úteros en las hembras y que se hace para eliminar la capacidad de reproducirse y reducir el deseo sexual de los perros.
Debido a la sobrepoblación de perros en algunos países, las asociaciones de control de los animales aconsejan esterilizar los perros que no se piense utilizar para criar, de manera que no tengan cachorros no deseados que deban matar.
La esterilización tiene otros beneficios aparte de eliminar la capacidad de procrear. Reduce los problemas causados por la hipersexualidad, especialmente en los machos. Las hembras esterilizadas tienen menos probabilidades de desarrollar ciertos tipos de cáncer, que afectan a las glándulas mamarias, los ovarios y otros órganos reprodutores
También puede tener efectos médicos no deseados. Aumenta el riesgo de incontinencia urinaria en las hembras y cáncer de próstata en los machos, así como de osteosarcoma, hemangiosarcoma, rotura del ligamento cruzado, obesidad y diabetes mellitus en ambos sexos. Los cambios hormonales que implica la esterilización tienen una alta probabilidad de cambiar en cierta medida la personalidad y el metabolismo del animal. Estudios recientes demuestran que los perros esterilizados en general son más agresivos hacia los humanos y otros perros y más miedosos y sensibles al tacto que los perros que no han sido esterilizados, aunque los efectos varían de un perro a otro. La esterilización de animales muy jóvenes puede causar más problemas de salud más adelante en la vida para ambos sexos.
Alimentación
Se suele alimentar al perro como si fuese un omnívoro, deduciéndose por ello que la mejor alimentación es la que fabrica la industria que procesa los desechos del proceso productivo de otras fábricas. En otras palabras: la comida seca o pienso canino. Dicho alimento se encuentra en una diversidad muy amplia de marcas y etapas que afirman favorece el correcto desarrollo canino.
Sin embargo, también existe una tendencia dentro de los fabricantes de comida procesada de eliminar por completo los cereales y granos de sus formulaciones, produciendo piensos secos caninos basados mayoritariamente en porcentajes altos de proteína de origen animal.65 Otras tendencias buscan a alimentar a los perros con comida cruda —mayoritariamente carne—, intentando imitar a la alimentación natural de los cánidos no-domesticados.
Cuando se cambia de marca comercial, o tipo de alimentación, será de forma progresiva, evitando hacerlo de forma abrupta; los alimentos nuevos deben introducirse gradualmente en un plazo de por lo menos 7 a 10 días, al cambiar la dieta, es conveniente ofrecer una cantidad menor del nuevo alimento ya que al sobrepasarse se pueden iniciar una serie de trastornos gastrointestinales, o también el rechazo de la nueva dieta.
Un buen indicador de que el perro tiene una buena digestión y excelente absorción de nutrientes son las heces pequeñas, firmes y oscuras, en cambio los volúmenes grandes de heces pálidas indican una absorción medianamente óptima. Un perro sano y bien alimentado, mantendrá un peso regular, pelaje brillante, y una actitud y actividad general dinámicas.
- Alimentos no recomendados para los perros
- Leche: algunos perros, como algunas personas, presentan intolerancia a la lactosa. Es por ello que debe dárseles con precaución, y, a la primera reacción adversa —vómitos, diarrea— suspenderla de inmediato
- Chocolate: contiene una sustancia llamada teobromina que causa intoxicación en el organismo del perro y puede ser fatal en grandes dosis.
- Golosinas: tales como frituras, caramelos, galletas; tienden a formar sarro en la dentadura del perro. Además los azúcares les hacen propensos a la diabetes. Existen golosinas especiales para ellos que incluso protegen de la formación de sarro.
- Huesos cocidos: en especial los de pollo. Al ser triturados por la mandíbula del perro pueden formar esquirlas con puntas muy agudas, las cuales fácilmente pueden perforar el esófago, intestino o recto provocando hemorragias internas, infección y consecuentemente mucho dolor.
- Alimentos o desperdicios caseros: se deben evitar los alimentos muy condimentados, ya que los perros son especialmente sensibles a la sal, pimienta y chile. De igual forma se deben evitar los alimentos con exceso de grasa. Los desperdicios o restos de alimentos, normalmente poco frescos deben ser eliminados. No se debe permitir que coman restos hallados en la calle, pues podría sufrir una gastroenteritis infecciosa.
- Tomate: puede afectar el sistema digestivo del perro, por lo que no es recomendable.
Predadores
Aunque los perros salvajes, como los lobos, son predadores alfa, pueden morir en combates territoriales con animales salvajes. Además en las zonas en las que los perros son simpátricas con otros predadores grandes, los perros pueden ser una fuente de alimento importante para cánidos o félidos grandes. En Croacia mueren más perros que ovejas, mientras que en Rusia los lobos limitan las poblaciones de perros ferales. En Wisconsin se paga una mayor compensación por la pérdida de perros que de ganado. Ha habido casos en los que un par de lobos matan perros, siguiendo un método en el que uno de ellos atrae al perro hacia vegetación densa, donde el otro lobo prepara una emboscada. En algunos casos, los lobos han mostrado una falta anormal de miedo de los humanos y de los edificios a la hora de atacar perros, hasta el punto que se les debe expulsar o matar. Los coyotes también atacan perros. Se conocen casos de fieras que matan perros. Se sabe que los leopardos tienen una predilección por los perros y han matado y se han comido incluso perros grandes y feroces. A diferencia de los leopardos que viven en la misma región, los tigres de la India raramente atacan perros, aunque en Manchuria, Indochina, Indonesia y Malasia, los tigres matan perros con el mismo vigor que los leopardos. Finalmente, las hienas rayadas son grandes predadores de perros en los pueblos de Turkmenistán, India y Cáucaso.
Razas
|
|
|
Hay numerosas razas de perro, las organizaciones cinológicas reconocen más de 800. Muchos perros, especialmente fuera de Estados Unidos y de Europa occidental, no pertenecen a ninguna raza reconocida. Unos cuantos tipos de perro básicos han evolucionado gradualmente durante la relación del perro doméstico con los humanos a lo largo de los últimos 10.000 años o más pero todas las razas modernas tienen un origen relativamente moderno. Muchas de ellas son el resultado de un proceso deliberado de selección artificial como en el caso de los terriers o de los schnauzers. Debido a esto, algunas razas están altamente especializadas y hay una diversidad morfológica extraordinaria entre razas diferentes. Pese a estas diferencias, los perros son capaces de distinguir los otros perros de otros tipos de animal.
La definición de lo que es una raza de perro es tema de una cierta polémica. Dependiendo del tamaño de la población fundadora original, las razas con un acervo génico reducido pueden tener problemas de consanguinidad, concretamente debido al efecto fundador. Los criadores de perros toman cada vez más conciencia de la importancia de la genética de poblaciones y de mantener patrimonios génicos diversos. Las pruebas de salud y ADN pueden contribuir a evitar problemas, ofreciendo un sustituto de la selección natural. Sin selección, los patrimonios génicos consanguíneos o cerrados pueden aumentar el riesgo de graves problemas de salud o de comportamiento. Algunas organizaciones definen una raza menos estrictamente, de modo que un ejemplar puede ser considerado de una raza siempre que el 75% de su ascendencia sea de esta raza. Estas consideraciones afectan tanto a los animales de compañía como los perros que participan en exposiciones caninas. Incluso perros con pedigrí que han sido premiados sufren dedefectos genéticos debido al efecto fundador o consanguinidad.77 Estos problemas no se limitan a los perros de pedigrí y pueden afectar ejemplares cruzados. Se puede predecir en cierta medida el comportamiento y la apariencia de un perro de una raza determinada, mientras que los cruces presentan un abanico más amplio de apariencia y comportamiento innovadores.
Los perros mestizos son aquellos que no pertenecen a ninguna raza determinada, sino que tienen ascendencia de diferentes razas. Tanto los perros de pedigrí como los mezclados son aptos como animales de compañía, perros de carga o competidores en deportes cinófilos. A veces se cruzan deliberadamente perros de dos razas diferentes para crear una raza mezclada como elCockapoo, que es una mezcla de cocker spaniel y caniche en miniatura. Estos cruces deliberados pueden presentar un cierto grado de vigor híbrido y otras características deseables, pero pueden o no pueden heredar características deseables de sus padres, como el temperamento o un determinado color o pelaje. Si no se hacen pruebas genéticas a los padres, los cruces pueden acabar heredando defectos genéticos presentes en las dos razas parientes.
Una raza es un grupo de animales que tiene un conjunto de características heredadas que los distinguen de otros animales de la misma especie. El cruce deliberado de dos o más razas también es una manera de crear nuevas razas, pero sólo será una raza cuando los descendientes presentan de forma fiable este conjunto de características y cualidades.
Usos y utilidad
Aunque una gran mayoría de perros son mantenidos como animales de compañía, existe también un gran número de formas en que los perros pueden ayudar a los seres humanos. En algunos casos se pueden aprovechar sus habilidades innatas, mientras que en otros hay que adiestrarlos.
Los perros de asistencia ayudan a las personas con discapacidades en tareas cotidianas. Como, por ejemplo, los perros de movilidad para los minusválidos, los perros guía para personas con deficiencias visuales y los perros de escucha para las personas con problemas auditivos. Los perros de terapia representan otra manera de ayudar a los enfermos; visitan personas que no pueden moverse con libertad, como, por ejemplo, la gente mayor que vive en residencias geriátricas o los enfermos ingresados en hospitales, ofreciéndoles diversión y entretenimiento. También se realizan cursos de adiestramiento de perros para prisioneros, como terapia de rehabilitación.
Los perros de búsqueda y rescate detectan el aroma que transportan las células de la piel que caen fuera de los humanos vivos a un ritmo de alrededor de 40.000 células por minuto,78 El sudor que se evapora o los gases respiratorios. Gracias a ello pueden buscar personas desaparecidas, perdidas en tierras salvajes, cubiertas por avalanchas de nieve, enterradas debajo de edificios que se han derrumbado, entre otras situaciones.
Los perros para la detección de cadáveres —a diferencia de los perros de búsqueda y rescate— están adiestrados para ignorar el olor de humanos vivos, junto con el aroma animal, y sólo buscar el olor de los gases de descomposición liberados por la acción de las bacterias en la piel o en los tejidos humanos. Estos perros pueden ser usados para encontrar restos humanos relacionados con escenas de crimen, casos de personas desaparecidas y evidencia forense relacionada con escenarios de desastres o escombros. Un tipo específico de perros también es entrenado para localizar restos mortales en el agua.
Los perros pastores son útiles para los pastores y ganaderos de todo el mundo para dirigir los rebaños; se utilizan diferentes razas para cada tarea y para vigilar los rebaños. Algunos perros pastores también protegen gansos salvajes en parques o cabras utilizadas para el control de malezas. Los perros pastores se pueden adaptar para controlar cualquier tipo de animal doméstico, o muchos tipos de animales salvajes. En cambio, los perros de caza ayudan a los cazadores a encontrar, rastrear y recuperar las presas, o eliminar alimañas. Es menos frecuente que los perros de presa o de caza mayor, luchen contra una presa como un oso o un jabalí.
Los perros de trineo, hoy en día se utilizan principalmente en eventos deportivos, aunque también pueden ayudar a transportar personas y víveres en terreno nevado y difícil. Los canes artísticos, como los perros de circo o los actores caninos, están adiestrados para realizar actos que no son útiles intrínsecamente, pero que entretienen al público o contribuyen a las actuaciones artísticas de los humanos.
Los perros de guardia ayudan a proteger la propiedad pública o privada, bien residiendo o bien durante patrullas, con cuerpos militares o con empresas de seguridad. Los perros policía son habitualmente adiestrados para rastrear o inmovilizar posibles criminales cuando ayudan a los policías a hacer detenciones o investigar la escena de un crimen. Algunos incluso están entrenados para cuerpos antiterroristas. Los perros de detección, en cambio, pueden ayudar a detectar sustancias ilegales, bombas, productos químicos y muchas otras sustancias.
Finalmente, los perros de guerra son utilizados por las fuerzas armadas en muchas de las situaciones en que se usan perros civiles, pero en un contexto militar. Además, tareas militares especializadas tales como la detección de minas o el tendido de cables han sido asignadas a perros.
Referencias
- Volver arriba↑ «Canis lupus familiaris» (en inglés), Catalogue of Life (2010 Annual Checklist), Sistema Integrado de Información Taxonómica (ITIS)
- Volver arriba↑ Dewey, T. and S. Bhagat (2002). «Canis lupus familiaris» (en inglés). Animal Diversity Web. Consultado el 21 de enero de 2009.
- Volver arriba↑ Wilson, D. E. & Reeder, D. M.. «Mammal Species of the World (3ª ed.)» (en inglés). Bucknell Univesity. Consultado el 21 de enero de 2009.
- Volver arriba↑ ION -Index to Organism Name
- Volver arriba↑ «The genomic signature of dog domestication reveals adaptation to a starch-rich diet». Nature(495): pp. 360–364. 11 de diciembre de 2012.doi:10.1038/nature11837.
- Volver arriba↑ Revista Nature (23 de enero de 2013). «The genomic signature of dog domestication reveals adaptation to a starch-rich diet» (en inglés). Consultado el 14 de mayo de 2013. «We identify candidate mutations in key genes and provide functional support for an increased starch digestion in dogs relative to wolves.».
- Volver arriba↑ Coppinger, Ray (2001). Dogs: a Startling New Understanding of Canine Origin, Behavior and Evolution. New York: Scribner. p. 352. ISBN 0-684-85530-5.
- ↑ Saltar a:a b El origen del perro, Marcelo Dos Santos, Axxón
- Volver arriba↑ Lindblad-Toh, K, et al. 2005. Genome sequence, comparative analysis and haplotype structure of the domestic dog. Nature, 438: 803–819
- Volver arriba↑ Descubren perro domesticado de hace 31,700 años. Mundo Neandertal
- ↑ Saltar a:a b c d Coppinger, Ray (2001). Dogs: a Startling New Understanding of Canine Origin, Behavior and Evolution. pp. p352. 0684855305.
- Volver arriba↑ Lopez, Barry (1978). Of wolves and men. pp. pàg.320. ISBN 0-7432-4936-4.
- Volver arriba↑ Dog Breed Info Center. Irish Wolfhound.
- Volver arriba↑ «tallest Dog Living». Guinness World Records.
- Volver arriba↑ FCI Chihuahua
- Volver arriba↑ Mastiff – Kaynine Online
- Volver arriba↑ .com/issues/0209/articles/020918a.htm Vegetable-Eating Dog Lives to Ripe Old Age of 29; Also: Who is the Oldest Dog in the World; And: How to Make Your Dog Live 1.8 Years Longer
- Volver arriba↑ Teske E.; Naan E. C.; van Dijk E. M.; Van Garderen E.; Schalk J. A. Canine prostate carcinoma: Epidemiological evidence of an increased risk in castrated dogs, Departamento de Ciencias Clínicas de Animales de Compañía, Universidad de Utrecht (Países Bajos).
- Volver arriba↑ Klappenbach, Laura (2008). «What is Counter Shading?». About.com. Consultado el 22-10-2008.
- Volver arriba↑ Cunliffe, Juliette (2004). «Coat Types, Colours and marking». The Encyclopedia of Dog Breed. Paragon Publishing. pp. 20–23.
- Volver arriba↑ ¿Cómo es la visión del perro?
- ↑ Saltar a:a b Corehn, Stanley (2004). How Dogs Think. First Free Press, Simon & Schuster.
- Volver arriba↑ A & E Television Networks (1998). Big Dogs, Little Dogs: The companion volume to the A & E special presentation, A Lookout Book, GT Publishing. ISBN 1-57719-353-9 (Hardcover).
- Volver arriba↑ Alderton, David (1984). The Dog, Chartwell Books. ISBN 0-89009-786-0.
- Volver arriba↑ «Dr. P s Dog Training: Vision in Dogs & People» (1998).
- Volver arriba↑ Australian Broadcasting Corporation (ed.): «Catalyst: Dogs ‘Eyes» (25 de septiembre de 2003).
- Volver arriba↑ «Refractive states of eyes and association between ametropia and breed in dogs». American Journal of Veterinary Research 69 (7): pp. 946-951. Julio 2008. doi:10.2460/ajvr.69.7.946.
- Volver arriba↑ Elert, Glenn; Timothy Condon (2003). «shtml Frequency Range of Dog hearing». The Physics Factbook. Consultado el 22 de octubre de 2008.
- Volver arriba↑ «How Well Do Dogs and Other Animals Hear?»(en inglés). Consultado el 14 de mayo de 2013.
- Volver arriba↑ «Understanding a Dog ‘s Sin of Smell». Dummies.com. Consultado el 22 de octubre de 2008.
- Volver arriba↑ «U/UNP-0066/UNP-0066.pdf The Dog ‘s Sin of» (PDF). Alabama and Auburn Universities. Consultado el 22 de octubre de 2008.
- Volver arriba↑ «Smell». nhm.org (6 de mayo de 2004). Consultado el 22 de octubre de 2008.
- Volver arriba↑ John W. Bradshaw (2006). «The Evolutionary Basis for the Feeding Behavior of Domestic Dogs (Canis familiaris) and Cats ( Felis catus)». The Journal of Nutrition 136: pp. 1927-1931.
- Volver arriba↑ «Dog Sin of Smell. Dog Taste Bud». GuideofDogs.com. Consultado el 12 de enero de 2009.
- Volver arriba↑ «Making Sin of Your Dog ‘s World». PetPlace.com. Consultado el 26 de enero de 2009.
- Volver arriba↑ Joël Dehasse (1994). «Sensory, emotional and social development of the young dog». The Bulletin for Veterinary Clinical Ethology (Bruselas) 2 (1-2): pp. 6-29.
- Volver arriba↑ Virginia Morell. «Minds of Their Own: Animals are smarter than you think» (en inglés). Animal mind. National Geographic. Consultado el 20 de mayo de 2013. «Just how easily new mental skills can evolve is perhaps best illustrated by dogs. Most owners talk to their dogs and expect them to understand».
- Volver arriba↑ «My Dog Can Do It!». Max Planck research (FOCUS_The in the Other): pp. 6-7. Consultado el 20 de mayo de 2013.
- Volver arriba↑ Elizabeth VanDyke (26 de julio de 1936). «New Freedom For Blind Americans Provided By ‘Seeing Eye’ Specially Trained Dogs Not Only See But Think For Sightless». Hartford Courant.
- Volver arriba↑ Dr. Gifford Jones (5 de diciembre de 2003). «Seeing Eye dogs can teach us a lesson».Kitchener Ontario Record.
- ↑ Saltar a:a b c d Kersti Seksel: Die Sozialisation des Hundewelpen. In: Vet. Focus 20 (2010), S. 7–12.
- Volver arriba↑ Dramard, Valérie (09/2007 (2ème édition)). Collection de Médecine Vétérinaire, Maisons-Alfort, ed. Pathologie du comportement du chien. du Point Vétérinaire. p. 191. ISBN 9782914738958.
- Volver arriba↑ «Dogs’ Expectation about Signalers’ Body Size by Virtue of Their Growls». PLoS ONE 5 (12): pp. e15175. 2010. doi:10.1371/journal.pone.0015175.PMID 21179521. Bibcode: 2010PLoSO…515175F.
- Volver arriba↑ Miklosi, Adam (27 de enero de 2009). Dog Behaviour, Evolution, and Cognition. Oxford University Press, 2007.doi:10.1093/acprof:oso/9780199295852.001.0001.
- Volver arriba↑ Mark Derr (2004). A dogs history of America. North Point Press.
- Volver arriba↑ «Enculturated chimpanzees imitate rationally.».Developmental Science. 2007. doi:10.1111/j.1467-8624.2008.01146.x..
- ↑ Saltar a:a b «Making inferences about the location of hidden food: social dog, causal ape.». Journal of Comparative Psychology 120 (1): pp. 38-47. 2006. doi:10.1037/0735-7036.120.1.38. Consultado el 15 de mayo de 2013.
- Volver arriba↑ Gedon, Trisha (25 de mayo de 2006). Oklahoma State University (ed.): «Summer heat can be tough». Division of Agricultural Sciences and Natural Resources.
- Volver arriba↑ «Oldest dog». Guinness World Records(2011). Consultado el 8 de mayo de 2011.
- Volver arriba↑ Botanical On Line: Expectativa de vida del perro
- Volver arriba↑ Dewey, T.; S. Bhagat (2002). «Canis lupus familiaris» (On-line), Animal Diversity Web. Consultado el 6 de enero de 2009 aAnimaldiversity.
- Volver arriba↑ «Sexual Maturity – Spay and neutro». Buffalo.com.
- Volver arriba↑ «Normal gestation in dogs».
- Volver arriba↑ «HSUS Pet Overpopulation Estimates». The Humane Society of the United States. Consultado el 22 de octubre de 2008.
- ↑ Saltar a:a b c Robinson, Roy (1990). Genetics for Dog Breeders. Ficha en OpenLibrary: Butterworth-Heinemann Limited. pp. 280 p. 15.ISBN 9780750646123.
- Volver arriba↑ «French Bulldog Pet Care Guide». Archivado desde el original el 26 de julio de 2011. Consultado el 7 de enero de 2008.
- Volver arriba↑ «Top 10 Reasons to Spay / neutro your pet». American Society for Prevention of Cruelty to Animals.
- Volver arriba↑ Heidenberger E.; Unshelm J. (1990). «Changes in the behavior of dogs after castration» (en Alemán).Tierärztliche Praxis 18 (1): pp. 69-75. PMID2326799.
- Volver arriba↑ Morrison, Wallace B. (1998). Cancer in Dogs and Cats (1st ed.). Williams and Wilkins. ISBN 0-683-06105-4.
- Volver arriba↑ Arnold S. (1997). «Urinary incontinence in castrated Bitches. Parte 1: Significance, clinical aspects and etiopathogenesis» (en German).Schweiz. Arch. Tierheilkd. 139 (6): pp. 271-6. PMID9411733.
- Volver arriba↑ Johnston S. D.; Kamolpatana K.; Root-Kustritz M. V.; Johnston G. R. (2000). «prostática Disorders in the dog». Anim. Reprod. Sci. 60-61: pp. 405-15. doi:10.1016/S0378-4320 (00) 00101-9.PMID 10844211.
- Volver arriba↑ Root-Kustritz M. V. (2007). «Determining the optimal age for gonadectomy of dogs and cados».JAVMA 231 (11): pp. 1665-1675.doi:10.2460/javma.231.11.1665.
- Volver arriba↑ Duffy, Ph. D., Deborah L.; James A. SERPELL, Ph. D. (2006). Non-Reproductive Effects of Spaying and Neutering donde Behavior in Dogs(PDF). Center for the Interaction of Animales and Society, School of Veterinary Medicine, University of Pennsylvania: Third International Symposium on Non-Surgical Contraceptive Methods for Pet Population Control.
- Volver arriba↑ «Long-term risks and benefits of early-age gonadectomy in cats». J Am Med Assoc 224:372. Febrero 2004. doi:10.1038/laban0510-140.
- Volver arriba↑ T. J. Dunn, Jr., DVM. «Focusing on Protein in the Diet» (en inglés). Consultado el 18 de junio de 2013.
- Volver arriba↑ Estar informado: Los problemas de alimentar con comida casera a perros y gatos
- Volver arriba↑ Cosas de perros: Salud
- Volver arriba↑ Foyel.com: Diarreas en perros y gatos
- Volver arriba↑ Foro sobre perros
- Volver arriba↑ L. David Mech & Luigi Boitano (2001). Wolves: Behaviour, Ecology and Conservation. Chicago: University of Chicago Press. p. 448.ISBN 0226516962.
- Volver arriba↑ Graves, Will (2007). Wolves in Russia: Anxiety throughout the ages. Calgary: Detselig Enterprises. p. 222. ISBN 1550593323.
- Volver arriba↑ Kojola, I.; Ronkainen, S.; Hakala, A.; Heikkinen, S.; Kokko, S.. Interaction between wolves Canis lupus and dogs C. familiaris in Finland.. Nordic Council for Wildlife Research.
- Volver arriba↑«ocr/sections/news/focus_in_depth/article_508026.php For coyotes, pedos are Prey». Greg Hardesty. Orange County Register. Consultado el 19 de agosto de 2007.
- Volver arriba↑ Jonathan & Angela Scott (2006). Big Cat Diary: Leopard. Londres: Collins. p. 108. ISBN 0007211813.
- Volver arriba↑ Perry, Richard (1965). The World of the Tiger. p. 260. ASIN: B0007DU2IU.
- Volver arriba↑ «Striped Hyaena Hyaena (Hyaena) hyaena(Linnaeus, 1758)». IUCN Species Survival Commission Hyaenidae Specialist Group. Consultado el 21-05 -2008.
- Volver arriba↑ Shook, Larry (1995). The Puppy Report: How to Select a Healthy, Happy Dog. Nueva York: Ballantine. pp. 57–72. ISBN 0 – 345-38439-3.
- Volver arriba↑ Ohio Valley Search and Rescue.Inc. Glossary
La leishmaniasis (o leishmaniosis) es un conjunto de enfermedades zoonóticas y antroponóticas causadas porprotozoos del género Leishmania.
Las manifestaciones clínicas de la enfermedad van desde úlceras cutáneas que cicatrizan espontáneamente, hasta formas fatales en las cuales se presenta inflamación grave del hígado y delbazo. La enfermedad es una zoonosis que afecta tanto a perros como a humanos. Sin embargo, animales silvestres como liebres, zarigüeyas, coatíes y jurumíes, entre otros, son portadores asintomáticos del parásito, por lo que se los considera animales reservorios.
El agente se transmite al humano y a otros animales a través de la picadura de hembras de los flebotomos, un grupo de insectos chupadores de sangre pertenecientes a los géneros Phlebotomus del Viejo Mundo, (Europa,África y Asia) y Lutzomyia en América, de la familia Psychodidae. En Colombia, en ciertas regiones, este tipo de insectos es más conocido como palomilla. En las zonas tropicales de Ecuador se lo conoce como «arenillas».
Leishmaniasis animal
La Leishmania invade diferentes órganos del perro y otros mamíferos como las liebres, provocando lesiones de diversa consideración, hasta producirse la muerte del animal. La sintomatología clínica es muy variada, pero cabe destacar lesiones en la piel, en las articulaciones y, cuando la enfermedad está ya bastante avanzada, problemas a nivel renal. El parásito se transmite a través de los jejenes. Cuando el jején pica al animal, le transmite la enfermedad con la Leishmania que inocula por medio de la picadura.
A diferencia de los mosquitos a los que estamos acostumbrados a ver, el jején es mucho más pequeño. No es nada fácil verlo, y tampoco oírlo, dado que no hace el típico zumbido al volar. Solamente pican las hembras, que necesitan sangre para desarrollar los huevos. Los machos se alimentan de azúcares y plantas.
La picadura del jején transmite la enfermedad sólo si previamente había picado a otro animal ya infectado. Los perros y otros mamíferos infectados no transmiten directamente la leishmaniosis a las personas, sino tras el vector alado, el jején. El reservorio habitual es el perro, pero para que la enfermedad se trasmita es imprescindible la participación del vector (mosquito flebotomo). Los perros no contagian la enfermedad directamente a otros animales ni a las personas, por ninguna vía.
La leishmaniasis no se puede curar, de momento, sólo tratar los síntomas y mantenerla a raya, si bien es importante diagnosticar la enfermedad lo antes posible. Actualmente ya existe una vacuna contra la leishmaniasis. El riesgo de contraer esta enfermedad se da principalmente en los países de la cuenca mediterránea y en América Latina, siendo las épocas de más riesgo las de mayor calor.
Es importante hacer un diagnóstico diferencial, que nunca sale certero debido a que hay enfermedades como schistosomiasis, brucelosis, malaria, hepatitis viral,histoplasmosis sistémica, tuberculosis, paracoccidioidomicosis diseminada, leucemia, linfoma, entre otras, pueden cursar con una clínica similar a la leishmaniasis visceral.
Signos clínicos de la leishmaniosis
Lluís Ferrer, med vet, PhD, Dipl ECVD (1). Xavier Roura, med vet, PhD, Dipl ECVIM-CA.
(1) Miembro del grupo LeishVet. Facultad de Veterinaria, Universitat Autònoma de Barcelona.(2) Miembro del Grupo de Estudio de la Leishmaniosis Canina (GSLC). Hospital Clínic Veterinari, Universitat Autònoma de Barcelona.
La leishmaniosis canina muestra un extraordinario polimorfismo clínico.
La característica más importante de la leishmaniosis canina es su extraordinario polimorfismo clínico. La leishmaniosis canina es una enfermedad sistémica o visceral y esto significa que puede afectar a numerosos sistemas u órganos y que, en la práctica, hay que incluirla en la mayoría de los diagnósticos diferenciales [1-3].
Debido a que los signos clínicos de la leishmaniosis canina no son patognomónicos, una buena evaluación de la reseña, de la anamnesis y de la exploración física es muy importante para confirmar la relación directa entre la infección por Leishmania y la clínica que muestra el perro.
Por ejemplo, no hay que olvidar que la leishmaniosis puede afectar a perros de cualquier raza, si bien algunas como el pastor alemán o el bóxer parecen ser más susceptibles [4-6]. También parece que hay una mayor predisposición de los machos a desarrollar la enfermedad [6-8], como ya está descrito en la especie humana [9] o en el hámster [10].
Además, la leishmaniosis canina tiene una distribución bimodal, con un pico de perros afectados con edad inferior a los 3 años y un segundo pico entre los 8 y 10 años de edad [6]. Es también muy importante saber si el perro vive o ha estado en áreas endémicas de leishmaniosis canina, si ha podido estar expuesto a los vectores transmisores de la misma (flebótomos) o si ha recibido tratamientos que puedan alterar el funcionamiento de su sistema inmunitario. La anamnesis se completa con la descripción de los signos clínicos que ha detectado el propietario en su perro y que pueden ser compatibles con la leishmaniosis canina [11].
¿Qué signos clínicos podemos encontrarnos?
Los signos clínicos (tabla 1) que se presentan en la leishmaniosis son producidos por dos principales mecanismos patogénicos, que vimos en el capítulo anterior:
Por un lado, una inflamación granulomatosa no supurativa en los lugares donde se multiplica el parásito |
Y, por otro, el depósito de inmunocomplejos en distintas localizaciones anatómicas [12]. |
Debido al primer mecanismo se han descrito manifestaciones clínicas en piel, hígado, intestino, ojos, riñón, hueso y mucosas [13-18]. Debido al segundo mecanismo aparecen lesiones mayoritariamente renales, oculares y vasculares [1,17-24].
No se conocen aún con certeza los mecanismos patogénicos de la presentación de la anemia [25] y de los trastornos de la hemostasis [20,21,27,28] en la leishmaniosis. La mayoría de autores piensan que las principales causas de estas alteraciones son la presencia de los procesos inmunomediados junto con el hecho de que la leishmaniosis sea una enfermedad crónica. Se han descrito en algunos casos depósitos de amiloide en diferentes órganos, aunque su importancia clínica parece poco relevante [29-31].
Tabla 1. Signos clínicos de la leishmaniosis canina. | |
Generales | Estado nutritivo deficiente hasta la caquexia, atrofia muscular, letargia, mucosas pálidas, epistaxis, linfoadenomegalia, hepato-esplenomegalia, cojera o inflamación articular, fiebre. |
Cutáneos o mucocutáneos | Dermatosis exfoliativa (localizada o general), dermatitis ulcerativa (uniones mucocutáneas, cojinetes o callos de apoyo), dermatitis paular, dermatitis nodular, lesión en la trufa (similar a pénfigo-lupus), onicopatías, híperqueratosis naso-digital. |
Oculares | Lesiones palpebrales, lesiones conjuntivales difusas o nodulares, lesiones corneales (queratitis nodular, queratoconjuntivitis o queratitis seca), lesiones de la esclera (epiescleritis o escleritis difusa o nodular), uveítis anterior difusa o granulomatosa, uveítis posterior (corioretinitis, hemorragia o desprendimiento de retina), glaucoma, panoftalmia, lesiones de la órbita (granulomas o miositis). |
Otros | Gastrointestinales o neurológicos. |
Los signos clínicos más frecuentes son los cutáneos, que se presentan, aproximadamente en el 80% de los perros enfermos. La linfoadenopatía, presente en un 70-80% de los pacientes, y los síntomas generales (fiebre, apatía, adelgazamiento y atrofia muscular) presentes en un 40-60%, son también muy frecuentes.
Luego se abre un amplio abanico que incluye signos clínicos renales y/u oculares, esplenomegalia, hepatomegalia, dolor, cojeras, diarrea, epistaxis, onicogrifosis, onicorrexis, fiebre, ictericia, síncopes o tos; que aparecen de forma variable con tantos por cientos de aparición que oscilan entre el 1% y el 20 % según los diferentes autores [1-3,12].
Los signos clínicos cutáneos más comunes son la presencia de una capa de pelo fino, sin brillo; la alopecia con exfoliación (descamación); la dermatitis ulcerativa; la dermatitis nodular; la dermatitis pústular; o los nódulos y ulceraciones en membranas mucosas [1,12,15,34,35].
También es amplio el número de signos oculares, destacando la blefaritis, conjuntivitis, queratitis seca, uveitis y celulitis orbitaria; lesiones que pueden conducir a un glaucoma o a la panoftalmia y por tanto incluso a la ceguera [17,18]. La glomerulonefritis es la alteración renal más frecuente.
En los perros se manifiesta con proteinuria que puede evolucionar a un síndrome nefrótico y en algunas ocasiones finalizar en una insuficiencia renal [ 20,30,31,37,38,39,42,44]. Los signos clínicos digestivos clásicos son la diarrea con o sin melena y los vómitos; ambos relacionados con colitis, duodenitis o secundaria a los problemas renales [13].
La hepatitis crónica se observa de forma ocasional [20]. La epistaxis, presente aproximadamente en un 10% de los casos, es uno de los signos clínicos más difíciles de explicar, ya que en su patogenia se barajan la vasculitis, la trombocitopenia, las coagulopatías, la hiperviscosidad y la inflamación ulcerativa de la mucosa nasal [21,22,26,27].
Apoyo en los resultados obtenidos en el laboratorio
Las pruebas de laboratorio de base son el hemograma completo, la bioquímica sérica, el proteinograma y el examen de la orina. En la leishmaniosis canina, estas pruebas pueden permitir detectar una o más alteraciones asociadas a la enfermedad, las cuales se describen en la tabla 2 [1-3]. Si se encuentran hallazgos relevantes en estas pruebas de base, puede ser interesante realizar otras pruebas más específicas [41-46].
Tabla 2. Alteraciones de laboratorio asociadas a la leishmaniosis canina. | |
Hemograma | Anemia poco o no regenerativa, anemia regenerativa (posiblemente inmunomediada), leucocitosis neutrofilica y monocítica con linfopenia y eosinopenia (leucograma de estrés), leucopenia, trombocitopenia. |
Coagulación | Hiperfibrinogenemia, alargamiento del PT y aPTT. |
Bioquímica | Híperproteinemia, hipoalbuminemia, híperglobulinemia, alteración ratio albúmina/globulina, azotemia, aumento de los enzimas hepáticos. |
Proteinograma | Hipoalbuminemia, aumento de las globulinas alfa 2 y gammapatia poli/monoclonal. |
Orina | Orina isostenúrica (1008-1012) o poco concentrada (<1030), proteinuria (en tira de orina o en ratio proteína/creatinina de orina). |
Sin embargo, en la mayoría de los casos aunque son de ayuda, los análisis clínicos muestran alteraciones que no son patognomónicas de la leishmaniosis canina. La hipergammaglobulinemia, presente en un 80% de los casos, la anemia en un 60% y la hipoalbuminemia en un 40% son las alteraciones analíticas más frecuentes.
La anemia es de tipo no regenerativo y es debida a que la leishmaniosis es una enfermedad crónica; aunque los hallazgos de títulos positivos de ANA y Coombs sugieren también la búsqueda de otras posibles explicaciones. En el hemograma también destaca la trombocitopenia (60%) y, dependiendo de los casos, leucocitosis o leucopenia. La hipergammglobulinemia es normalmente policlonal [43], aunque se han detectado casos en los cuales puede ser monoclonal [36].
La hipoalbuminemia es compensatoria a la hipergammaglobulinemia y también consecuencia de la glomerulonefritis [44]. Otras alteraciones son incrementos de la ALT, gamma GT, urea o creatinina y la presencia de proteinuria o de hematuria [20,37,41,42,44].
Decisión del diagnóstico
Con toda la información el clínico veterinario debe decidir si incluir la leishmaniosis en la lista de diagnósticos diferenciales o no.
En cualquier caso, si los signos clínicos permiten incluir la leishmaniosis canina en el diagnóstico diferencial, es recomendable proseguir la investigación de laboratorio para confirmar o excluir su presencia.
Bibliografía
- Slappendel RJ: Canine leishmaniasis. A review based on 95 cases in The Netherlands. Vet Q 10:1-16, 1988.
- Ciaramella P, Oliva G, Luna RD, et al.: A retrospective clinical study of canine leishmaniasis in 150 dogs naturally infected by Leishmania infantum. Vet Rec 141(21):539-543, 1997.
- Koutinas AF, Polizopoulou ZS, Saridomichelakis MN, et al. Clinical consideration on canine leishmaniasis in Greece: a retrospective study of 158 cases (1989-1996). JAAHA 35:376-383, 1999.
- Abranches P, Silva-Pereira MCD, Conceiçao-Silva F, Santos-Gomes GM et al.: Canine leishmaniasis: Pathological and ecological factors influencing transmission of infection. J Parasitol 77:557-561, 1991.
- Sanchez-Robert E, Altet L, Sanchez A, Francino O: Polymorphism of Slc11a1 (Nramp1) gene and canine leishmaniasis in a case-control study. J Hered 96(7): 755-758, 2005.
- Miranda S, Roura X, Picado A, Ferrer L, Ramis A. Characterization of sex, age, and breed for a population of canine leishmaniosis diseased dogs. Res Vet Sci. 85(1): 35-38, 2008.
- Brandonisio O, Carelli G, Ceci L, Consenti B, et al.: Canine leishmaniasis in the Gargano promontory (Apulia, South Italy). Eur J Epidemiol 8(2): 273-276, 1992.
- Fisa R, Gallego M, Castillejo S, Aisa MJ, et al.: Epidemiology of canine leishmaniosis in Catalonia (Spain) the example of the Priorat focus. Vet Parasitol 83(2):87-97, 1999.
- Shiddo SA, Aden Mohamed A, Akuffo HO, Mohamud KA, et al.: Visceral leishmaniasis in Somalia: prevalence of markers of infection and disease manifestations in a village in an endemic area. Trans R Soc Trop Med Hyg 89(4):361-365, 1995.
- Travi BL, Osorio Y, Melby PC, Chandrasekar B, et al.: Gender is a major determinant of the clinical evolution and immune response in hamsters infected with Leishmania spp. Infect Immun 70(5):2288- 96, 2002.
- Alvar J, Canavate C, Molina R, Moreno J, et al.,: Canine leishmaniasis. Adv Parasitol 57:1–88, 2004.
- Slappendel, RJ. And Ferrer, L. Leishmaniasis. En: C.R. Greene, editor. Infectious Diseases of the Dog and Cat. Second Edition. Philadelphia: W.B. Saunders: 450-458, 1998.
- Ferrer L, Juanola B, Ramos JA, Ramis A. Chronic colitis due to Leishmania infection in two dogs. Vet Pathol 28: 342-343, 1991.
- Buracco P, Abate O, Guglielmino R, Morello E. Osteomyelitis and arthrosynovitis associated with Leishmania donovani infection in a dog. J Small Anim Pract 38: 29-30, 1997.
- Font A, Roura X, Fondevila D, Closa JM, Mascort J, Ferrer L. Canine mucosal leishmaniasis. J Am Anim Hosp Assoc 32: 131-137, 1996.
- Franch J, Pastor J, Torrent E, Lafuente P, Diaz-Bertrana MC, Munilla A, Durall I. Management of leishmanial osteolytic lesions in a hypothyroid dog by partial tarsal arthrodesis. Vet Rec. 155(18): 559-62, 2004.
- Peña MT, Roura X, Davidson MG. Ocular and periocular manifestations of leishmaniasis in dogs: 105 cases (1993-1998). Vet Ophthalmol 3(1): 35-41, 2000.
- Peña MT, Naranjo C, Klauss G, Fondevila D, Leiva M, Roura X, Davidson MG, Dubielzig RR. Histopathological features of ocular leishmaniosis in the dog. J Comp Pathol. 138(1): 32-39, 2008.
- Koutinas AF, Kontos V, Kaldrimidou II, Lekkas S. Canine leishmaniasis associated nephropathy: a clinical, clinicopathologic and pathologic study in spontaneous cases with proteinuria. Eur J Comp Anim Pract 5: 31-38, 1995.
- Valladares JE, Riera C, Pastor J, Gállego M, Portús M, Arboix M. Hepatobiliar and renal failure in a dog experimentally infected with Leishmania infantum. Vet Rec 141: 574-575, 1997.
- Valladares JE, Ruiz de Copegui R, Riera C, Alberola J, Gallego M, Espada Y, Portús M, Arboix M. Study of haemostatic disorders in experimentally induced leishmaniasis in Beagle dogs. Res Vet Sci 64: 195-198, 1998.
- M, Brevick I, Badiola J, Vargas A, Domingo M, Ferrer L. Canine leishmaniasis associated with systemic vasculitis in two dogs. J Comp Pathol 105: 279-286, 1991.
- Nieto CG, Navarrete I, Habela MA, Serrano F, Redondo E. Pathplogical changes in kidneys of dogs with natural Leishmania infection. Vet Parasitol 45: 33-47, 1992.
- Nieto CG, Viñuelas J, Blanco A, García-Alonso M, Verdugo SG, Navarrete I. Detection of Leishmania infantum amastigotes in canine choroid plexus. Vet Rec 5: 346-347, 1996.
- Biswas T, Pal JK, Naskar K, Ghosh DK, Ghosal J. Lipid peroxidation of erythrocytes during anemia of the hamsters infected with Leishmania donovani. Mol Cel Biochem 146: 99-105, 1995.
- Font, A, Gines C, Closa JM, Mascort J. Visceral leishmaniasis and disseminated intravascular coagulation in a dog. J Am Vet Med Assoc 204: 1043-1044, 1994.
- Petanides TA, Koutinas AF, Mylonakis ME, Day MJ, Saridomichelakis MN, Leontides LS, Mischke R, Diniz P, Breitschwerdt EB, Kritsepi M, Garipidou VA, Koutinas CK, Lekkas S. Factors Associated with the Occurrence of Epistaxis in Natural Canine Leishmaniasis (Leishmania infantum). J Vet Intern Med 22: 866–872, 2008.
- Font A, Durall N, Domingo M, Closa JM, Mascort J, Ferrer L. Cardiac tamponade in a dog with visceral leishmaniasis. J Am Anim Hosp Assoc 29: 95-100, 1993.
- George JW, Nielsen SW, Shiveley JN, Hopek S, Mroz S. Canine leishmaniasis with amyloidosis. Vet Pathol 13: 365-373, 1976.
- Poli A, Abramo F, Mancianti F, Nigro M, Pieri S, Bionda A. Renal involvement in canine leishmaniasis. A light-microscopic, immunohistochemical and electron-microscopic study. Nephron 57: 444-452, 1991.
- Costa FA, Goto H, Saldanha LC, Silva SM, Sinhorini IL, Silva TC, Guerra JL. Histopathologic patterns of nephropathy in naturally acquired canine visceral leishmaniasis. Vet Pathol. 40(6): 677-84, 2003.
- Wolschrijn CF, Meyer HP, Hazewinkel HA, Wolvekamp WT. Destructive polyarthritis in a dog with leishmaniasis. J Small Anim Pract 37: 601-603, 1996.
- Torrent E, Leiva M, Segalés J, Franch J, Peña T, Cabrera B, Pastor J. Myocarditis and generalised vasculitis associated with leishmaniosis in a dog. J Small Anim Pract. 46 (11): 549-52, 2005.
- Ferrer L, Rabanal R, Fondevila D, Ramos JA, Domingo M. Skin lesions in canine leishmaniasis. J Small Anim Pract 29: 281-388, 1988.
- Ferrer L, Fondevila D, Marco A, Pumarola M. Atypical nodular leishmaniasis in two dogs. Vet Rec 126: 90, 1990.
- Font A. Consider leishmaniasis in differential for monoclonal gammopathies in dogs (letter; comment). J Am Vet Med Assoc 208: 184, 1996.
- Cortadellas O, Fernández-del Palacio MJ, Talavera J, Bayón A. Serum phosphorus concentrations in dogs with leishmaniosis at different stages of chronic kidney disease. Vet Rec. 164(16): 487-490, 2009.
- Cortadellas O, Fernández del Palacio MJ, Talavera J, Bayón A. Glomerular filtration rate in dogs with leishmaniasis and chronic kidney disease. J Vet Intern Med. 22(2): 293-300, 2008.
- Cortadellas O, del Palacio MJ, Bayón A, Albert A, Talavera J. Systemic hypertension in dogs with leishmaniasis: prevalence and clinical consequences. J Vet Intern Med. 20(4): 941-947, 2006.
- Terrazzano G, Cortese L, Piantedosi D, Zappacosta S, Di Loria A, Santoro D, Ruggiero G, Ciaramella P. Presence of anti-platelet IgM and IgG antibodies in dogs naturally infected by Leishmania infantum. Vet Immunol Immunopathol. 110(3-4): 331-337, 2006.
- Martìnez-Subiela S, Tecles F, Eckersall PD, Cerón JJ: Serum concentrations of acute phase proteins in dogs with leishmaniasis. Vet. Rec 150(8): 241-244, 2002.
- Bonfanti U, Zini E, Minetti E, Zatelli A: Free light-chain proteinuria and normal renal histopathology and function in 11 dogs exposed to Leishmania infantum, Ehrlichia canis, and Babesia canis. J Vet Int Med 18(5): 618-624, 2004.
- Romdane MN, Ben Romdhane S, Jemli MH, Metoui K. Profils électrophorétiques dans la leishmaniose canine. Revue Méd Vét 143(10): 753-756, 1992.
- Palacio J, Liste F, Gascón M. Urinary protein/creatinine ratio in the evaluation of renal failure in canine leishmaniasis. Vet Rec 137: 567-568, 1995.
- Solano-Gallego L, Riera C, Roura X, Iniesta L, et al.: Leishmania infantum- specific IgG, IgG1 and IgG2 antibody responses in healthy and ill dogs from endemic areas. Evolution in the course of infection and after treatment. Vet Parasitol. 96(4): 265-276, 2001.
- Rosypal AC, Gogal RM Jr, Zajac AM, Troy GC, et al.: Flow cytometric analysis of cellular immune responses in dogs experimentally infected with a North American isolate of Leishmania infantum. Vet Parasitol 131: 45-51, 2005.
Muchos son los posibles planes de vacunación para nuestra mascota, los laboratorios proponen su plan, los criadores proponen el suyo, pero el único realmente capacitado para proponer y realizar la correcta inmunización es su veterinario, él conoce la incidencia de cada enfermedad en su zona, pudiendo, de esta manera coordinar un perfecto plan de inmunización.
El cachorro recibe una primera inmunidad de su madre debido a los anticuerpos contenidos en el calostro, estos se transmiten principalmente durante las primeras 24 horas de vida al mamar, estos anticuerpos luego desaparecen por lo tanto el cachorro no estará protegido si no se comienza la vacunación.
Los cachorros nacen con parásitos porque la madre se los ha transmitido a través de la placenta y luego con la leche en la lactancia, por eso es muy importante desparasitarlos antes de su primera vacuna.
Si tus perros son Rotweiller, Husky, Dobermann o Golden o tienen algo de estas razas dentro de su herencia genética, puedes colocar la primera dosis de PARVOVIRUS antes de los 45 días (la de bajo pasaje viene para administrar a partir los 30 días) porque estas razas son muy susceptibles a esta enfermedad.
Plan de vacunación:
- A los 45 días de vida primera dosis de PARVOVIRUS.
- A las 9 semanas de edad se dará la segunda vacuna que será para protección contra MOQUILLO CANINO, ADENOVIRUS TIPO 2, HEPATITIS INFECCIOSA C y LEPTOSPIROSIS.
- Y la segunda dosis de PARVOVIRUS. Opcional CORONAVIRUS.
- A las 12 semanas de vida se repite una dosis de la vacuna anterior y la tercera de PARVOVIRUS.
- A partir de los 4 meses de edad se vacunará contra la RABIA.
- Luego hay que repetir anualmente la vacuna QUINTUPLE (PARVOVIRUS / MOQUILLO / HEPATITIS / PARAINFLUENZA/ LEPTOSPIROSIS) y RABIA.
Se DESPARASITA con cada vacunación porque además de eliminar los parásitos, el antiparasitario estimula las defensas y ayuda a que la vacuna produzca un mejor efecto inmunizante. Luego de terminado el plan de vacunación se DESPARASITA en forma periódica cada 4 MESES y con cada revacunación.Dra Laura B. Fioritotiendanimal.com
Mi perro tiene tos: Colapso traqueal.
Vamos a dedicar una serie de artículos a tratar enfermedades que producen tos entre sus síntomas más característicos. ya hemos hablado con anterioridad de una enfermedad muy frecuente y de origen infecciosos en nuestros perros: la tos de las perreras, y ahora vamos a hablar de otras enfermedades que también son de muy frecuente presentación, más de lo que podemos imaginarnos.
Manuel Olivares Martín, veterinario de la Clínica Veterinaria OLIVARESTodos los que tenemos perros o nos movemos en el mundo del perro los habremos oído toser más de una vez. La tos es tan frecuente en nuestros perros como lo puede ser en los seres humanos y, al igual que ocurre en nosotros, las causas de la tos pueden ser muy variadas: procesos irritativos, inflamatorios, infecciosos, neoplásicos, anomalías de conformación, procesos cardiacos, etc.
Hoy vamos a tratar en concreto un proceso denominado colapso traqueal, proceso que consiste en que la tráquea, en alguno de sus tramos, sufre un aplanamiento en dirección dorsoventral, el cual es debido a que hay una debilidad estructural en los anillos cartilaginosos que la forman junto a una laxitud de la membrana dorsal de la tráquea.
Este proceso es de tipo degenerativo y es un proceso crónico. Se afectan con mayor frecuencia los perros de razas pequeñas y miniatura ( Yorkshire terier, caniche, pomerania chihuahua, etc.) de cualquier edad, aunque en la mayoría de los casos los síntomas empiezan a mostrarse en edades adultas ( 5-7 años).
¿Cómo podemos sospechar que nuestro perro padece un colapso traqueal? En principio ya hemos dicho que se suele presentar en perros de razas pequeñas y miniatura y en edades adultas, lo que no excluye la aparición en cualquier edad. El perro afectado mostrará un cuadro de toses crónicas aunque en casos severos o en agudizaciones del proceso, puede aparecer un cuadro disneico muy importante ( gran dificultad respiratoria).
El perro afectado por esta enfermedad puede mostrar intolerancia al ejercicio y en casos severos puede aparecer disnea y síncopes. Es por ello que los perros que tienen colapso traqueal deban estar muy controlados en casos que agudicen la sintomatología, tales como el ejercicio, las temperaturas elevadas, ambientes muy calurosos o con contaminación ambiental ( humo del tabaco, por ejemplo), así como el peso corporal ( la obesidad puede originar acúmulo de grasa en la región mediastínica de tal forma que comprime la tráquea y disminuye su calibre).
Cuando acudimos con nuestro perro al veterinario, este le realizará un examen general ya que hay enfermedades que pueden superponerse al colapso traqueal. Así podemos citar problemas laríngeos, bronquiales, pulmonares y ciertas cardiopatías. Tras un buen examen y toma de datos (anamnesis), se procede a realizar un estudio complementario que suele requerir la realización de radiografías. A veces es preciso realizar fluoroscopia, broncoscopia, electrocariogramas, ecocardiografía, etc., dependiendo de la sintomatología o de los datos que se van obteniendo.
El tratamiento del colapso traqueal puede ser mediante medicamentos o mediante cirugía. La mayoría de los perros afectados, sobre todo en los grados más leves, tienen una buena respuesta a la medicación. Suelen emplearse medicamentos tales como broncodilatadores, antitusígenos, corticoides, antibióticos si hay sospecha de infección. En determinados casos, sobre todo en cuadros agudos o en crisis severas, la intranquilidad del animal puede potenciar la gravedad del cuadro y llevar a la presentación de grave disnea y síncope. En esos animales puede ser recomendable el uso de una sedación para rebajar el estado de ansiedad y mejorar así el cuadro respiratorio.
En cuadros en los que el colapso es muy marcado o nen los que no hay buena respuesta al tratamiento médico, es preciso recurrir a la cirugía y así existen tratamientos como es la colocación de implantes endotraqueales (stents), prótesis, etc., los cuales SIEMPRE deberán ser realizados por cirujanos especialistas en este tipo de intervenciones para aumentar el porcentaje de éxito del tratamiento.
Más información sobre enfermedades que producen tos en el perro
Queremos recordaros que en la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) ponemos a vuestra disposición nuestro Servicio de Urgencias Veterinarias 24 horas, así como el teléfono de consulta que aparece en nuestra página (www.tuveterinario.info), también operativo las 24 horas y donde podéis consultar todas las dudas que os surjan sobre este o cualquier otro tema relacionado con la salud y cuidados de vuestros animales.
Manuel Olivares Martín, veterinario de la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) y de www.tuveterinario.info