Fotografiar perros en movimiento no es tarea sencilla, sobre todo si son animales muy activos y que no paran de moverse. Ellos no son como las personas a las que les puedes pedir que posen para ti.
Por lo general, les tendremos que fotografiar por sorpresa en actitud juguetona, durmiendo o mientras están distraídos con algo, o bien haciéndoles que presten atención con algún juguete o similar.
Conseguir que un perro o un gato pose para nosotros es tarea imposible y tendremos que tener paciencia y esperar que el animal adopte una pose interesante y que sea de nuestro agrado para poder inmortalizar ese momento para la posteridad.
A continuación os daremos algunos consejos para conseguir buenas fotos de vuestra mascota.
La luz
La mejor luz es la luz natural. Con el flash obtendremos fotos planas, sin relieve y con cierto toque ‘artificial’. La mejor luz es la luz de días nublados. Las nubes proporcionan luz difusa y este hecho propiciará fotografías sin excesivos contrastes que permitirán iluminar todos y cada unos de los rincones de la exposición.
Si el día es soleado puedes usar la luz del flash como luz de relleno para disminuir zonas con poca luz y alto contraste y conseguir fotos excepcionalmente iluminadas.
Capta su atención
La única forma en que podremos hacer ‘posar’ a nuestras mascotas es distrayéndoles con un juguete para que, mantengan la atención y realicen poses mientras están en tensión decidiendo qué hacer.
Lo ideal es que otra persona juegue con tu mascota y capte su atención mientras tú intentas encontrar el momento idóneo para disparar.
Aprovecha los momentos de distracción
Otra forma de hacerle fotos de calidad a tu mascota es conseguir un teleobjetivo para poderle hacer fotos a cierta distancia sin que se de cuenta de que estamos cerca de ella.
Si nos acercamos a nuestras mascotas con nuestra cámara, probablemente vendrán hacia nosotros para inspeccionar ‘esa cosa que llevamos entre las manos’ y no podremos encuadrarlas de forma correcta. Además, si nuestra mascota es un perro nos exponemos a que el objetivo de nuestra cámara reciba un generoso y amistoso lametazo.
Lo ideal sería poder conseguir un teleobjetivo de 200mm o superior para poder realizar fotos a cierta distancia acercando la imagen como si estuviéramos justo a su lado. Además con un objetivo de estas características conseguiremos exposiciones con poca profundidad de campo (a mayor distancia focal menor profundidad de campo). Una profundidad de campo pequeña nos permite realizar fotografías en las cuales el objeto a fotografiar aparece totalmente nítido mientras que el resto de la imagen del fondo aparece totalmente borrosa. Este efecto (usado en retratos de personas) permite obtener fotografías con gran relieve enfatizando la imagen principal y difuminando el resto de la imagen.
Ponte a su altura
Cuando hagas fotos a tu mascota, agáchate y ponte siempre a su altura. Si haces la fotografía desde tu perspectiva la imagen perderá interés puesto que la foto será hecha desde la perspectiva humana.
Cuando te agachas y te pones a su altura, te sumerges en su mundo y ves la realidad tal y como ellos la ven. Los resultados te sorprenderán, ya lo verás.
Prueba encuadres distintos
Las mascotas, como los seres humanos, se ven muy distintos dependiendo de la posición desde donde la fotografíes. Hazle fotos de cuerpo entero o de partes más concretas de su cuerpo como por ejemplo: cara, patas, nariz, barriga, etc.
Trata de captar su personalidad para conseguir fotos donde parezca que te está intentando decir alguna cosa.
Mascotas y personas
Las fotografías en las que aparezca tu mascota junto a personas especiales para ella, son extremadamente gratificantes. Te permitirán captar miradas, gestos y posturas que evocarán gran emoción y ternura.
Puedes probar con fotos posadas pero por lo general las mejores fotos son las que se consiguen de forma espontánea y sin que animal y humano sean conscientes de la cámara.
Sé rápido
Las mascotas, como los perros y gatos, realizan movimientos rápidos e inesperados y deberemos estar preparados para captar ese momento único en el se consigue una buena fotografía. Deberás de poner a prueba tus reflejos y ser el más rápido pulsando el botón de tu cámara.
Para evitar fotos borrosas o movidas, deberemos usar tiempos de obturación cortos par intentar ‘congelar’ la imagen. Muchas cámaras actuales disponen de posiciones programadas y automáticas para realizar este tipo de fotos deportivas (suele aparecer el icono de una persona corriendo).
Fotografiar a tu mascota es como fotografiar un deportista de elite en plena acción. Si conseguimos captar una buena imagen conseguiremos ver facetas de nuestra mascota que pasan inadvertidas a simple vista.
Haz fotos, fotos y más fotos
Actualmente tenemos la suerte de vivir en plena era de la fotografía digital. Casi todos disponemos ya de cámaras digitales con lo que no deberemos de preocuparnos si tiramos fotos que posiblemente no se verán bien, con el consiguiente gasto que ello implica a la hora de revelar carretes analógicos.
Muchas cámaras admiten el modo de disparo en ráfaga. El disparo en ráfaga consiste en pulsar el disparador y, dependiendo las características de la cámara, poder hacer varias fotografías en un sólo segundo. Con este método tendremos muchas más posibilidades de conseguir alguna que otra buena fotografía que capte ese momento único.
Si estamos jugando a tirarle la pelota a nuestra mascota, una buena estrategia sería empezar a disparar en modo ráfaga, tirarle la pelota y seguir el recorrido de nuestra mascota haciendo fotos sin levantar el dedo del botón. De este modo haremos fácilmente 20 o 30 fotografías en las que nuestra mascota apenas habrá recorrido 5 o 6 metros de distancia.